Sergio “Kun” Agüero anunció esta semana que no iba a jugar más profesionalmente al fútbol. En una conferencia de prensa muy emotiva y con lágrimas en los ojos dijo que prefería darle prioridad a su salud. Lo lógico en estos casos, aunque a veces gana más el deseo de seguir.
Hace un par de meses sufrió una arritmia en un partido contra el Alavés. Los espectadores en el estadio y en la televisión no podían saber que la imagen del argentino saliendo de la cancha tomándose el pecho iba a ser la última que verían del Kun como futbolista profesional.
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No son muchos los jugadores que conectan con la gente desde el primer minuto. Sergio Agüero es uno de ellos. Debutó a los 15 años en Independiente y de ahí no paró de enamorar a los aficionados en donde estuvo. Su mejor época la vivió en el Manchester City. Si escribes su nombre en YouTube la mayoría de videos que aparecen es de aquel gol en el último momento contra el Queens Park Rangers que le dio el título tan ansiado al equipo dirigido en ese entonces por Roberto Mancini.
He visto muchos partidos en los estadios, pero nunca me tocó ver a Agüero en vivo. Hace un par de meses se jugó el Clásico en el Camp Nou y aproveché que no era difícil encontrar boletos para poder presenciar el partido. El bajo nivel del Barcelona influyó en que la gente no tenía ganas de ir así que desde la propia página del Barça pude hacerme de un par de entradas. Además de ser mi primer Clásico tenía especial curiosidad por ver al Kun Agüero en la cancha y no me defraudó.
El argentino venía saliendo de una lesión así que fue suplente aquel día. Cuando salió a calentar el Camp Nou lo celebró como si hubieran marcado un penal a favor. Venía de hacer su debut una semana antes ante el Valencia donde jugó solamente tres minutos, pero ya se había ganado al público. Esa tarde ante el Real Madrid el Kun Agüero marcó su único gol con el Barcelona. El último que haría como futbolista profesional. Nadie de los que pudieron ver el partido ese día se hubiera podido imaginar eso.
Quedarán muchas anécdotas del Kun dentro y fuera de la cancha. El último detalle que tuvo como jugador del Manchester City fue darles un regalo a varios de los trabajadores del club en su despedida. Un reloj para cada uno como muestra de agradecimiento por los últimos años, pero lo mejor estaba por venir. Hizo una rifa en donde el premio era su Range Rover. El ganador fue Ally Marland, utilero del equipo, quien decidió subastar el auto para donar parte de las ganancias a un hospital infantil.
Sergio Agüero fichó el 31 de mayo por el Barcelona para disfrutar y jugar con Messi con quien siempre ha tenido una gran amistad, pero que nunca habían jugado juntos en un club. Casi siete meses después de su llegada tuvo que decirle adiós al fútbol sin haber podido conseguir ese último deseo.
Gracias, Kun, buena suerte y hasta luego.