Barbora Krejcikova (33ra/DB 7ma) prolongó su alegría en Roland Garros al conquistar también la prueba de dobles, en compañía de su compatriota y amiga Katerina Siniakova (DB 8va). Las tenistas checas, ambas de 25 años, se impusieron en la final a la polaca Iga Swiatek (9na/DB 59na) y la estadounidense Bethanie Mattek-Sands (DB 16ta) en sets corridos, por 6/4 y 6/2. El partido se disputó en el Court Philippe Chatrier, el estadio central del predio situado en las afueras de París. La oriunda de Brno venía de consagrarse el sábado en el certamen de individuales ante la rusa Anastasia Pavlyuchenkova (32da), en el mismo escenario.
Krejcikova y Siniakova, segundas favoritas del torneo, lograron su tercer título de Grand Slam en conjunto. Se trata de una dupla experimentada en el rubro, en la temporada 2018 alzaron este mismo trofeo y el de Wimbledon. En el cotejo decisivo no tuvieron mayores inconvenientes frente a Swiatek y Mattek-Sands, una pareja que combina jerarquía, juventud y experiencia. Las vencedoras fueron amplias dominadoras en gran parte del encuentro y consiguieron su objetivo tras una hora y 14 minutos de juego.
Krejcikova festejó dos veces en Roland Garros, algo muy difícil de lograr en el circuito. La última jugadora en celebrar por duplicado en la gran cita de las pistas lentas fue la francesa Mary Pierce en la edición 2000, la segunda copa en sociedad con la suiza Martina Hingis. Histórico lo realizado por Barbora en el segundo Grand Slam del calendario. También fantástico, tanto que sorprendió a todo el planeta del tenis, menos a ella, que soñó esto y se preparó para concretarlo.