El atacante brasileño, Roberto Firmino, llegó a ser pieza fundamental del poderoso Liverpool dirigido por Jürgen Klopp, uno de los equipos de mayor prestigio en la historia del fútbol.
‘Bobby’ Firmino junto con Sadio Mané y Mohamed Salah conformaron uno de los tridentes más temibles y explosivos en el mundo del balompié en el Siglo XXI. Todos esas alegrías y éxitos pudieron verse interrumpidas por un momento complicado que vivió en diciembre del año 2016.
- TAMBIÉN PUEDES LEER: Lamar Odom: La ruta de excesos que casi le cuesta la vida
- TAMBIÉN PUEDES LEER: Paul Gascoigne: El genio que tuvo un camino lleno de excesos
Firmino y el día que entendió que el volante y el alcohol no deben mezclarse
Foto: Twitter @LFC
El extremo de Maceió fue detenido por un control policial británico justamente en la madrugada del 24 de diciembre del 2017 a las 3:00 am en Nochebuena, tras haber estado conduciendo bajo los efectos del alcohol. A pesar de que no ocurrió tragedia alguna, Firmino no midió las consecuencias que su acción pudo haber ocasionado.
En ese entonces, la carrera del seleccionado brasileño iba a la alza. Llevaba cinco goles y dos asistencias en 15 partidos, siendo un pilar en el buen comienzo de la temporada para los ‘Reds’.
De acuerdo con su abogado, Michael Hogan, Firmino habría incurrido a conducir ebrio debido al estrés sufrido por un robo a su casa días antes del suceso, en el que afortunadamente él y su familia no estuvieron presentes.
Un par de días atrás, unos ladrones se colaron en la casa del delantero y hurtaron diversos artículos como joyas, relojes y prendas de ropa que en total habrían tenido un valor de alrededor de 70 mil libras esterlinas (85 mil dólares aproximadamente).
Semanas más tarde, fue citado a declarar a la corte por su acto. Una vez realizadas las investigaciones y con las declaraciones correspondientes en las que Firmino admitió su culpabilidad, se le decretó la suspensión de su licencia para conducir por todo un año y una multa de 20 mil libras esterlinas (25 mil euros).
Además, el jugador de entonces 25 años ofreció una disculpa al club, directivos, cuerpo técnico, compañeros y aficionados.
“Lo que hice estuvo mal y da mal ejemplo. Prometo a todos los integrantes de la familia del Liverpool haber aprendido de este error, de esta experiencia, la cual, no se repetirá en el futuro.”
Afortunadamente para Firmino y para sus seguidores, habría aprendido la lección y el brasileño no se ha vuelto a involucrar en una nueva polémica con el alcohol de por medio.
