Una nueva estrella llegará a la ciudad de Los Ángeles y a la Major League Soccer con la incorporación del campeón del mundo Hugo Lloris a la portería del LAFC tras una longeva carrera de 11 años con el Tottenham Hotspur.
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El experimentado guardameta francés que conquistó la Copa del Mundo en Rusia 2018, cerró su capítulo en Europa para continuar expandiendo la carta de presentación de la liga de Estados Unidos con jugadores de élite de la talla de Lionel Messi, Sergio Busquets, Luis Suárez, entre otros.
A pesar de su extraordinaria faceta defendiendo el arco de la Selección de Francia y de equipos como el Nice, Lyon y el Tottenham, fue durante su aventura en Londres la que lo dejó con un pequeño ‘trago amargo’ al verse involucrado con la bebida y el tribunal.
Lloris no pudo detener al alcoholímetro
En un 2018 que significó uno de sus mejores años futbolísticos, no se pudo resumir de la misma forma fuera de las canchas, ya que el 24 de agosto, el entonces arquero de los Spurs fue detenido por las autoridades en Marylebone al arrojar un resultado positivo en un control de alcoholemia; la prueba señaló 80 microgramos de alcohol por cada 100 mililitros de aliento, más doble permitido en Inglaterra (35 microgramos).
Por consecuencia, Lloris tuvo que ser trasladado a la comisaría Charing Cross y ser puesto bajo fianza. Tan solo un mes después, se declaró su culpabilidad en el caso con lo que el tribunal británico le retiró su permiso de conducir por 20 meses y le impuso una multa de 56,200 euros.