Vasiliy Lomachenko y Gervonta Davis encabezan las dos principales carteleras en este fin de semana, en donde el ex campeón ucraniano busca remontar su reciente revés ante Teófimo López, mientras el estadounidense busca mantener su racha de nocauts que se acerca a los siete años.
Lomachenko enfrentará al japonés Masayoshi Nakatani en Las Vegas, en un combate que tiende a indicar que el ex campeón unificado ligero debe dominar. Nakatani, fuera de su combate titular ante Teófimo López en el 2019 en donde lo llevó a la distancia, y su sorprendente victoria ante el puertorriqueño Félix Verdejo, ha hecho casi toda su carrera en Japón frente a rivales de poca monta.
En su combate ante López, Lomachenko no lució a la altura de sus pasados combates, lanzando muy pocos golpes en los primeros seis asaltos antes de apretar el paso del séptimo en adelante, en un esfuerzo perdido. Posterior al combate, el equipo del ex campeón ligero apuntó que Lomachenko peleó con un hombro lastimado que afectó su producción de golpes.
Nakatani, sin embargo, le puede hacer la vida difícil a Lomachenko, que necesita impresionar para volver a destacarse no sólo en el Top 10 de diferentes medios, sino en la propia división ligera. El japonés de 32 años le lleva marcada ventaja en estatura y alcance, lo que podría hacerle difícil el utilizar su jab, que conecta en promedio en siete ocasiones por asalto, y el colocar un golpe que envíe a la lona a su rival.
La presión de Lomachenko no será de todo fácil, ya que enfrenta a público por primera ocasión desde el inicio de la pandemia del Covid-19 y tiene que lucir a la altura para lograr a futuro ser considerado como principal contendiente ligero en una división que incluye a López, Davis, Ryan García y Devin Haney.
Gervonta Davis tiene prueba difícil
En Atlanta, Davis buscará la corona de peso junior welter versión de la Asociación Mundial de Boxeo ante el también invicto Mario Barrios, que trae a la mesa 26 victorias, 17 de ellas por nocaut.
Davis surge como favorito ante su rival, nativo de San Antonio, Texas basado en su impresionante ristra de nocauts, Sin embargo, hay que tener en consideración que sube dos categorías de peso luego de destruir a Leo Santa Cruz el pasado 31 de octubre y que Barrios le lleva ventaja en estatura de poco más de cuatro pulgadas.
La hoja de Davis tiene varias victorias impresionantes. Desde que conquistó el título en 2017 ante el puertorriqueño José Pedraza por la vía rápida, ha despachado a siete rivales al hilo, incluyendo a Santa Cruz, un Yuriorkis Gamboa en decaída así como a los invictos Francisco Fonseca y Liam Walsh.
Davis, sin embargo, fuera de Santa Cruz no ha enfrentado a nadie a la altura de López, García, Haney o el propio Lomachenko. La gran duda, de hecho, es ver cómo puede sobreponerse a la venta en estatura y alcance y si su pegada se mantiene en un peso más alto ante un boxeador natural de ese peso como lo es Barrios.
Las apuestas en Las Vegas lo colocan como favorito, aunque resta ver si el subir dos divisiones afectará su ejecución el sábado