Redacción deportes, 1 oct (EFE).- Tras ganar Wimbledon en julio pasado, Novak Djokovic regresó a una final del circuito ATP tras deshacerse en las semifinales del torneo de Tel Aviv del ruso Roman Safiullin (6-1 y 7-6(3)) que reaccionó y exigió al balcánico en el segundo set.
El exnúmero uno del mundo no competía en el circuito desde que ganó en Londres al australiano Nick Kyrgios para sumar su vigésimo primer Grand Slam. Fue hace tres meses. Solo reapareció el balcánico la semana pasada para disputar la Laver Cup.
Ahora, Djokovic, que necesita acumular méritos para obtener un lugar en las Finales ATP, apunta a su tercer éxito del 2022 en Tel Aviv. Ganó en Wimbledon y el Masters 1000 de Roma y perdió la final de Belgrado frente al ruso Andrey Rublev.
Sacó adelante el choque con Safiullin, 101 del ránking ATP y sin repercusión alguna en los torneos. Tardó una hora y 35 minutos en resolver un choque que se le enredó en el segundo parcial, donde creció su adversario y que tuvo que solventarse en el ‘tie break’.
Novak Djokovic reina en Wimbledon y amplia su hegemonía
El serbio reclamó con éxito su cuarto título consecutivo en una final que mantuvo a los aficionados al límite por un poco más de tres horas, pues ‘Nole’ tuvo que venir de atrás para detener al australiano de 27 años que lució imparable con sus servicios y poner en aprietos al ex-número 1, pero la experiencia terminó siendo determinante al final del día.
Y es que tras haber caído en el primer set con el mejor armamento de Kyrgios que terminó con un total de 30 aces, Djokovic logró recuperarse poco a poco resolviendo de mejor manera sus devoluciones y aprovechando la desesperación de su contrincante que en repetidas ocasiones se dirigió a su equipo y a los presentes por sus propios errores.