No, no era el mítico recuerdo de Queen o de Michael Jackson en sus tan aclamados conciertos. Si había un protagonista que podía arribar a Ciudad Universitaria y ser capaz de iluminarla con el destello de su clase mundial, ese es Dani Alves, la flamante contratación de los Pumas de la UNAM.
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El Olímpico Universitario deslumbró como nunca antes se le había visto en los últimos años con la presencia de más de 35 mil aficionados que encendieron el recinto para recibir calurosamente a su fichaje estelar en su debut frente a Mazatlán, un acontecimiento que parecía vivir una antesala más allá de un juego de temporada regular, pues los ojos de todo México estaban sobre el brasileño.
En medio de ovaciones y cánticos hacia la calidad de Alves como jugador a sus 39 años, los Pumas rescataron un punto en el empate a uno contra los mazatlecos que para muchos, la exhibición universitaria valió más su peso en oro sobre los hombros del máximo laureado en la historia del fútbol, quien al final del día, ya alzó la mano para ser clave en el andar de su nuevo conjunto tras haber asistido en la jugada del único tanto de los locales.
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🐾⚽🔥 ¡Gooool de @PumasMX!Servicio de Dani Alves y Freire marca el empate 👏😀
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Alves satisfecho con su actuación
Con el currículum en su mano de pisar los mejores escenarios y recorrer el mundo decenas de ocasiones, todos aguardaban porque sus tachones pusieran un pie en CU sin esperar que lo hiciera de arranque; sin embargo, Andrés Lillini se sacó el ‘as bajo la manga’ para colocarlo no solo en el once inicial, sino los 90 minutos.
Esto le permitió al ex-futbolista del Barcelona tomar ritmo en su primer encuentro en México en una posición de la cual no está acostumbrado al jugar como contención, pero que a la larga, le generó mucha satisfacción tanto a él como a la que ahora será su nueva afición.
“No hemos podido sacar la victoria, pero para ser mi debut no está mal”, confesó Alves. “Apenas llegué y ya tuve que jugar 90 minutos, para poder sentir el campeonato, a los compañeros y poder sentir a los rivales. Poco a poco uno se adapta, voy conociendo a mi equipo”.
“Quedan muchas cosas por hacer, el equipo tiene personalidad, tiene muchas ganas y seguramente vamos a escalar posiciones”, sentenció.
Ahora, el dorsal 33 tendrá un peso muy especial no solo para los Pumas, también para la propia Liga MX al recibir a un futbolista con un recorrido tan exitoso, pues Alves sabe que no arribó al combinado auriazul pensando en el retiro, sino para ser alguien fundamental con mucho liderazgo y que pueda aportar esa diferencia que tanto han buscado los universitarios.