Jorge “El Nino de Oro” Linares es un guerrero y nadie debe dudarlo.
Durante su carrera de 18 años como profesional el púgil venezolano ha tenido sus altas y bajas, pero tres reinados en la división pluma, superpluma y ligero demuestran su estatus como uno de los mejores boxeadores latinoamericanos de su generación.
Ahora excampeón mundial buscará acercarse a una nueva oportunidad titular cuando regrese este viernes ante el mexicano Carlos “The Solution” Morales en el evento co estelar del combate entre Ryan García y Francisco Fonseca en el Honda Center de Anaheim, California (DAZN).
“Estoy más que listo para empezar fuerte este año contra Carlos Morales”, indicó Linares. “El 2019 fue un año difícil para mí, pero ya he estado en altas y bajas en mi carrera, y siempre he logrado reponerme. Este 14 de febrero voy a mostrar por qué me convertí en campeón mundial en cuatro ocasiones por medio de una contundente victoria, y después espero pelear por un título mundial en un futuro cercano”.
Linares (46-5, 28 KOs), de 34 años, viene de vencer a Al Toyogon en septiembre del 2019 luego de sufrir un sorpresivo revés por nocaut técnico ante el mexicano Pablo César Cano el pasado enero. Anterior a eso, había tenido una exitosa campaña en las 135 libras desde el 2014 al conseguir dos títulos mundiales antes de caer por nocaut técnico ante el ucraniano Vasly Lomachenko en mayo del 2018.
El venezolano ahora tendrá que reafirmar que todavía le queda gasolina en el tanque como contendiente ya que las oportunidades titulares comienzan a escasear cuando llegan los inesperados tropiezos.
“Carlos Morales es muy duro y fuerte. Lo conozco muy bien. Aunque tengo mucha experiencia, tengo que ser muy cuidadoso y cauteloso cuando suena la campana”, dijo Linares, cuyas cinco derrotas han sido por la vía rápida. “En este momento, estoy concentrado en el oponente que tendré frente a mí. Después de eso, veremos qué oportunidades tenemos. ¿Quién sabe? ¿Quizás pelee en mayo o junio? El boxeo es así. Nunca se sabe”.
Para Morales (19-4-4, 8 KOs) será una gran oportunidad para descarrilar el futuro de Linares y colocarse en posición de pelear por primera vez por un título mundial.
“Es un honor poder compartir el cuadrilátero con un triple campeón mundial divisional”, sostuvo Morales. “La única manera de llegar a la cima de esta división es pelear con los mejores. Ahí es donde quiero estar, y por eso los fans observarán lo mejor de mí”.