Marruecos está escribiendo historia dorada en la Copa el Mundo de Qatar 2022, es el primer equipo del continente africano en llegar a una semifinal y además lo hace vs Francia, un rival con el que ha tenido una historia cultural y política por lo que está en juego, mucho más que una simple semifinal.
En primer lugar, es importante recordar que aunque solo es un partido de fútbol, para Marruecos hay detrás una serie de acontecimientos históricos por los que este duelo toma otros tintes y encima, con los acontecimientos que ocurrieron la semana pasada en Francia, donde la policía tuvo enfrentamientos con marroquís por celebrar el pase a la siguiente ronda, el clima es hasta cierto punto, tenso.
Francia consiguió llegar a su primer semifinal de una Copa del Mundo en Suecia 58′, dos años después de que Marruecos lograra su independencia del protectorado y desde entonces has pasado millones de migrantes que hoy forman parte del pueblo francés por derecho, pero que llevan sangre marroquí en sus orígenes.
Por increíble que parezca, Francia no será completamente ‘local’ en su propio país pues el apoyo para Marruecos será muy amplio en varias ciudades gracias a miles de personas de segunda y hasta tercera generación que hoy conforman el segundo grupo étnico-cultural, solo detrás del argelino.
Marruecos y su apoyo ‘europeo’
Se estima que más de cinco millones de marroquís viven fuera de su país y están en su gran mayoría en países como Bélgica (donde también celebraron el pase a semifinales, acompañados por la policía local que evitó grandes disturbios), algunos más están en España, Italia, los Países Bajo pero su gran mayoría está en Francia.
Recordemos que Marruecos, armó su convocatoria con 14 de sus 6 futbolistas no nacidos en ese país, por lo que son la mayor cantidad de jugadores no nacidos en ese suelo vistiendo esa camiseta y como señaló Hakim Ziyech, vestir la camiseta de los ‘Leones del Atlas’ es un llamado al corazón.
Como tal, el partido no tiene el carácter de ser uno con una gran rivalidad, ni mucho menos para catalogarlo como un clásico pero con todo lo que actualmente se vive, sí que será de una importancia que jamás había tenido un duelo de este tipo y menos porque se trata de una semifinal de un Mundial.