A lo largo de mi historia, aprendí a tratar de sacar lo positivo de todo y basado en eso seguir adelante. La dura realidad es que más allá de los problemas que enfrentemos en lo personal o como sociedad, cuando abrimos los ojos y nos damos cuenta de que se nos dio un nuevo día en el planeta tierra, hay que dar lo mejor de acuerdo a las circunstancias y aprovechar la oportunidad.
- Un Verano de Oro para la selección de fútbol de Estados Unidos
- La conquista Qatarí en la Copa Oro
El innecesario título de Lionel Messi
Leer más de El Punto G del Deporte
Lo digo porque mientras viva, admiraré la resiliencia de la sociedad en general ante el COVID. Pese al confinamiento total del principio, hemos aprendido a manejar los tiempos de manera acordeónica para seguir cumpliendo nuestros compromisos.
El mundo del deporte en general no fue la excepción, poco a poco hemos regresado a la normalidad ajustando nuestras vidas a los protocolos de salubridad y de esta forma se han jugado las principales ligas de los diferentes deportes y eventos tan importantes como la Eurocopa o la Copa America se realizaron ya sea sin público, en burbuja o con capacidad limitada.
Pero vendría un reto diferente y mucho más complejo, el de Tokio y los Olímpicos. El acomodar a miles de deportistas de diferentes disciplinas en una villa olímpica parecía fuera de toda consideración o posibilidad, más aún cuando los casos positivos de COVID han llegado a picos muy altos en tiempos recientes en la capital japonesa.
Pese a los muchos que estuvieron en contra y que decían que lo más sensato hubiera sido otra posposición, Tokio se le midió al reto mas grande que ha enfrentado evento deportivo alguno durante la pandemia.
Los Olímpicos no solo se llevaron a cabo sino que nos dejaron momentos inolvidables de competencia pura, récords, historias de vida y sirvieron como una bocanada de aire fresco en medio de una situación extremadamente difícil.
Gracias Tokio por la valentía de afrontar el reto. Gracias por cuidar a todos siguiendo los protocolos mientras al mismo tiempo nos dejaban disfrutar de otra olimpiada. Gracias por dar lo mejor con todas las limitaciones. Gracias por hacer lo mejor con lo que tenían.