La facultad innata para realizar un swing y golpear la pelota llevándola de un extremo a otro hasta llegar a un hoyo, le permitieron a Tiger Woods convertirse en una auténtica leyenda viviente del golf cuyo existo podría estar a altura de las hazañas logradas por otros grandes del deporte profesional cuyos nombres se ganaron un espacio permanente en la historia estadounidense producto de su herencia ligada a Asia.
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No obstante, el caso de este atleta originario de Cypress, California, resulta muy peculiar pues inició cuando sólo tenía dos años y su padre lo llevó a recorrer un campo de golf donde —casi 12 meses después—, sin saber leer, el pequeño firmó una tarjeta de 48 golpes en nueve hoyos, hazaña que le valió la primera publicación de su nombre en las páginas de un par de revistas.
Eldrick es hijo único del matrimonio formado por el afroamericano Earl Woods, exteniente coronel de la armada estadounidense, y Kultida Woods, mujer de origen tailandés, pero con ascendencia china y neerlandesa.
Por iniciativa de su padre, al niño nacido el 30 de diciembre de 1975, casi de inmediato se le comenzó a llamar “Tiger”, esto en honor a un amigo suyo, el coronel Vuong Dang Phong, quien originalmente era conocido con dicho sobrenombre.
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Tiger Woods y su ADN deportivo
Introducido a muy temprana edad en el golf, Tiger Woods destacó por triunfar en la sección de menores de 10 años de la competencia Drive, Pitch y Putt.
Posteriormente, su nivel competitivo fue en ascenso hasta lograr hacerse notar en los campeonatos de aficionados para menores efectuados en Estados Unidos, donde obtuvo los títulos en 1994, 1995, y 1996.
Luego, al competir durante dos años en la Universidad de Stanford, ganó el título de NCAA.
En 1996, el atleta revelación se convirtió en golfista profesional y en tres meses ganó dos torneos profesionales.
Mas tarde, al participar de manera continua y exitosa en varios de los torneos, su ascenso lo llevó a ocupar la cima de la PGA con premios económicos bastante importantes que en menos de una década lo convirtieron en el deportista mejor pagado del mundo con $87,000,000 de dólares en un solo año.
Al igual que Jack Nicklaus y Arnold Palmer, Eldrick Woods se ganó a pulso su etiqueta de ídolo, pues es el segundo golfista con más majors ganados en la historia del golf, 15 en total.
En su vitrina de trofeos figuran cinco títulos en el Masters de Augusta, tres en el Abierto de los Estados Unidos, otra cantidad similar de títulos en el Abierto Británico, y cuatro en el Campeonato de la PGA.
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Entre accidentes y lesiones
A pesar de haber alcanzado la gloria deportiva, una dolorosa lesión en la espalda provocó que el nivel competitivo de Tiger Woods fuera mermando e incluso por un breve lapso tuvo que dejar de competir para someterse a una cirugía de la cual salió bien librado.
No obstante, su debilidad por los romances y la velocidad, le han cobrado una enorme factura a su carrera, así como en algún momento a su relación matrimonial.
A finales del 2009, el ídolo del golf sufrió un accidente automovilístico cuando salía de su casa en Florida después de haber discutido con Elin Nordegren quien en ese momento era su esposa y la madre de sus dos hijos.
Además de varias heridas causadas en su rostro, el percance sacó a relucir que Tiger Woods recurrentemente le había sido infiel a su pareja y ello lo llevó a la separación.
Después de ello, la carrera del golfista nunca ha vuelto a ser la misma y el punto más complicado en su vida surgió a raíz de otro accidente automovilístico ocurrido en febrero de 2021, cuando perdió el control de la camioneta en la cual se desplazaba y terminó vivo de milagro, pero con severas afectaciones, sobre todo en una pierna.
Aunque el fenómeno de golf ha querido resurgir como el Ave Fenix de sus cenizas, el tiempo parece causar estragos en su swing, algo que en nada demita su legado ni tampoco los cerca de $800,000,000 de dólares de su fortuna.
