Los encuentros entre Brasil y Argentina siempre han estado cargados de intensidad, agresividad y jugadas polémicas para los dos equipos. El día de ayer no fue la excepción. Durante el empate entre los dos países sudamericanos, el jugador de la albiceleste, Nicolás Otamendi, le dio un tremendo codazo a Raphinha en minuto 33 del primer tiempo.
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Para sorpresa de los espectadores y de la banca brasileña, Otamendi ni siquiera fue amonestado y no se marcó ningún tipo de falta a favor de los pentacampeones del mundo.
Blood drawn and only 35′ in ??? #CONMEBOL #BRAvsARG pic.twitter.com/l9kUXw4p4v
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Este tipo de error ocasionó que la CONMEBOL decidiera dar de baja por tiempo indeterminado tanto al árbitro como los encargados del VAR. En un comunicado publicado por la institución encargada de organizar los juegos al sur del continente americano, se estipuló que la jugada fue una “conducta violenta” ya que puso “en peligro la integridad física” del militante del Leeds de Inglaterra.
¡Últimos boletos disponibles! ?✈
Brasil y Argentina ya se subieron al avión rumbo a Catar. ¿Quiénes ocuparán los lugares restantes? ???#EliminatoriasSudamericanas pic.twitter.com/n3XhAD90LR
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Bajo este contexto, el órgano deportivo optó por suspender a Cunha y Ostojich por incurrir en una grave falta. Este decreto vino desde la Comisión de Árbitros de la Conmebol. Según la comisión, ambos sujetos “cometieron graves errores y fallaron en el ejercicio de sus funciones en el desarrollo del partido”.
Tras el resultado de anoche, Messi y compañía lograron asegurar su clasificación al Mundial que se disputará en Qatar el próximo año y así acompañar a Brasil, que ya igualmente calificó a la contienda internacional.