Los Juegos Olímpicos Tokyo 2020 ya estrenaron los podios para engrandecer el nombre de los atletas que se prepararon durante cinco años para vivir el momento más feliz de sus carreras deportivas.
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En medio de una justa veraniega que ha tenido que cargar con el peso de la pandemia COVID-19, muchos medallistas olímpicos han hecho caso omiso de las rigurosas normas para evitar la propagación del virus, luego de que en la primera entrega de medallas del pasado domingo, el uso de las mascarillas pasó a segundo término donde los galardonados no acataron la indicación y posaron sin ellas para las icónicas fotografías.
A pesar de que el Comité Olímpico Internacional (COI) había estipulado estrictamente previo al inicio de los Olímpicos, que los y las deportistas debían portar su cubrebocas en todo momento, el mismo organismo acordó ceder ante la importancia que representa para los medallistas.
“El protocolo de la ceremonia de las medallas se ha adaptado para permitir que los deportistas den una imagen a los medios que capture sus rostros y sus emociones durante un momento único en su carrera deportiva”, externó el COI.
Por ello, los galardonados tendrán ahora 30 segundos para capturar la imagen sin mascarillas, una vez que concluya el himno nacional del ganador de la competencia, mientras muestran la consecución de las preseas en su propio escalón del podio.
Sin embargo, durante la ceremonia de ciclismo de ruta de este domingo, Anna Kiesenhofer (oro), Annemiek van Vleuten (plata) y Elisa Longo Borghini (bronce), no cumplieron con la especificación e ignoraron el distanciamiento social al abrazarse para la fotografía.
El comité organizador declaró que el número de infectados por COVID-19 relacionados con Tokyo 2020, aumentó a 137, de los cuales 14 son deportistas.