Madrid (EFE) – Sergio Ramos, capitán del Real Madrid, aseguró que la jugada que puso el clásico a favor de su equipo en el Camp Nou, un agarrón de Clément Lenglet que el colegiado señaló penalti tras revisar el VAR, “es clarísima”, y celebró un triunfo que aleja la “energía negativa” y muestra “el camino” para conseguir títulos.
“Son marcajes que van al límite y la jugada del penalti es clarísima. Me agarra cuando voy a intentar saltar y es bastante claro. Juzgar al árbitro por una acción tan clara es injusto. lo hacen lo mejor que pueden, a veces aciertan y otras no pero el VAR está para ayudarnos. El penalti ha sido justo y después con el 1-2 no metimos el culo atrás, aprovechamos el bajón anímico que tuvieron ellos para ir a buscar el tercer gol y no defender el resultado”, manifestó en Movistar+.
El capitán madridista fue clave para la reacción tras recuperarse de sus molestias de rodilla. Apuntó el clásico como el partido perfecto para firmar una reacción.
“Era una semana para reivindicarnos, teníamos una oportunidad única en un clásico, un partido único en el mundo que es un extra de motivación. Lo afrontábamos con muchas ganas, había que estar unidos porque no hay tiempo para lamentarse. A lo largo de la temporada se pasan malas rachas y ha durado una semana”, señaló.
“Lo anímico es más importante incluso que lo físico y esta victoria nos viene muy bien para afrontar los próximos partidos. Hemos dejado al margen la crítica y estamos contentos. Hay que saborearlo pero esto sigue. Lograr una victoria en el clásico, en casa del eterno rival es muy gratificante”, añadió.
Ramos analizó el partido con un inicio de “mucho respeto” y pocos espacios, pero en el que lograron cumplir las consignas de Zinedine Zidane. “Hemos salido motivados a intentar presionar al Barça en campo contrario. Conseguimos el objetivo de marcar y quitarle el balón. La posesión en la primera parte la ganamos y en la segunda decidimos estar en bloque medio, La victoria nos viene de categoría. El equipo demuestra su compromiso y la crítica no debe dañarnos”.
Citó en varias ocasiones el capitán madridista la crítica que han recibido tras dos derrotas seguidas de local ante el Cádiz en LaLiga Santander y Shakhtar en Liga de Campeones, dejando bien claro la unidad que existe dentro del vestuario.
“Llevo 16 temporadas aquí y una semana de crisis en el Real Madrid son dos partidos malos. Nuestros objetivos no cambian, debemos seguir fiel a nuestro rumbo e intentar sumar de tres en tres, ahora pensar en la Chamions y no pensar en la crítica que intenta destruir la buena energía que tenemos dentro. No hay que sacar pecho aunque son tres puntos que saben a gloria en un partido especial”, valoró.
“Esa energía negativa se acaba palpando pero lo que más tiempo llevamos nos encargamos de sacarla aunque sea con aspiradora. Igual que no estamos cuatro días celebrando un clásico, no saboreamos la derrota. Este equipo ha ganado mucho, queremos volver a hacerlo y este es el camino”, sentenció. EFE