Momentos de enorme incomodidad e impotencia experimentaron los jugadores de los Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León durante su arribo al Estadio Akron, donde el autobús en que viajaban fue agredido de manera extremadamente violenta por seudoaficionados de Chivas.
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Una horda de bárbaros vestidos con el jersey de las Chivas aguardó pacientemente al momento de la llegada del vehículo que transportaba al conjunto neoleonense.
Fue entonces cuando un individuo con una gran bandera del Rebaño Sagrado se paró de frente al autobús y no lo dejaba avanzar ante la complicidad de la policía del municipio de Zapopan para tratar de retirarlo.
De esta manera, en cuestión de segundos, el grupo de rijosos comenzaron a arrojar una lluvia de latas, piedras, vasos y hasta palos.
Aunque los objetos estrellaron un par de vidrios del autobús, ninguna persona resultó herida y los representantes de las autoridades se limitaron a tomar algunas fotografías y videos sobre el estado físico en que terminó el autobús.
Por desgracia, ninguno de los individuos que causaron destrozos pudo ser detenido para que se le fijará algún castigo administrativo. No obstante, en la Liga MX podría surgir alguna sanción para el Club Deportivo Guadalajara por no establecer un adecuado protocolo de seguridad enfocado en evitar este tipo de incidentes.