El Estadio Azteca se someterá a una significativa remodelación en preparación para el Mundial 2026, donde será sede de cinco partidos, incluyendo la inauguración el 11 de junio. Estos trabajos son necesarios para cumplir con los requerimientos de la FIFA para escenarios mundialistas.
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La remodelación del Coloso de Santa Úrsula implicará cambios estructurales, estéticos y de accesibilidad para mejorar la experiencia de aficionados, medios de comunicación y jugadores. Además, se incrementará su capacidad a cerca de 90 mil espectadores.
El plan de remodelación abarca 11 áreas: fachada, amenidades, áreas de competencia, tribuna baja, espacios para discapacitados, zona de prensa, cocinas, acondicionamiento de la cancha, espacios de hospitality, mejoras en baños y túneles, y mejoras estructurales.
El exterior del estadio se transformará significativamente con la instalación de 2 mil metros cuadrados de pantallas LED, que le darán un aspecto renovado y moderno.
Los cambios más relevantes del Estadio Azteca
Uno de los cambios más relevantes será en los vestidores, que serán reubicados de la cabecera norte al lateral este, lo que implicará demoler la grada baja en ese sector. Los vestuarios de jugadores, árbitros y la zona médica contarán con instalaciones modernas.
La FIFA requiere zonas de hospitality, por lo que se crearán dos áreas laterales que ofrecerán comida, bebidas, salas lounge y la posibilidad de ver de cerca a los jugadores. Para los aficionados, habrá nuevas áreas de entretenimiento, comida, bebidas y comercios. Además, se mejorarán los accesos al estadio, remodelando los túneles y construyendo un nuevo espacio para personas con discapacidad.
La zona de prensa también será reubicada, pasando de la parte alta de la grada oeste a la esquina noreste, y contará con conectividad a internet y pantallas.
Tecnológicamente, el estadio contará con red wi-fi para todos los asistentes y se instalará un nuevo sistema de audio, seguridad y vigilancia para garantizar la seguridad durante los eventos.
La remodelación costará 80 millones de dólares y se espera que se complete en un plazo aproximado de año y medio, aunque estos números están sujetos a revisión.