Un 27 de abril de 1956, con apenas 32 años de edad, Rocco Francis Marchegiano, mejor conocido como Rocky Marciano, anunciaba su retiro del boxeo y se alejaba del ring como el invicto campeón de los pesos pesados.
The Rock, como también era llamado, fue un aficionado al baseball y jugador frustrado desde que era pequeño. Incluso intentó convertirse en jugador profesional probándose con el equipo Fayeteville Cubs, filial de los Chicago Cubs, pero fue rechazado después de tres semanas y siempre fue criticada su “carente fuerza para lanzar la pelota”, debilidad que se revirtió a ojos de todos cuando se convirtió en púgil.
Del baseball al boxeo y al estrellato
Rocky tuvo una peculiar carrera como boxeador. A los 19 años fue reclutado por el ejército estadounidense para realizar su servicio militar, y fue ahí, donde vivió por algún tiempo en Swansea, Gales, donde comenzó a pelear. Como amateur, tuvo un récord de 9-4 y, para cuando terminó sus obligaciones militares en marzo de 1946, interrumpió el amateurismo para pelear un 17 de marzo de 1947, como profesional, ante Lee Epperson, a quien noqueó en tres asaltos.
Sorpresivamente, regresó a pelear amateur en donde fue derrotado en dos ocasiones, la última (y pelea final en categoría aficionado) contra George McInnis. Fue hasta el 12 de julio de 1948 retomó el profesionalismo y nacía la leyenda cuando, ante Harry Bilizarian, ganó por knockout técnico.
No paró, y fue hasta su pelea 43, con récord 42-0 (37 KO’s), que se pudo adjudicar el título de los pesos pesados de la Asociación Nacional de Boxeo (hoy Asociación Mundial de Boxeo) al noquear a Jersey Joe Walcott en el treceavo round.
A partir de ahí, tuvo seis exitosas defensas al título hasta su retirada en abril de 1956. 49 peleas, 49 victorias y 43 terminadas por la vía rápida, con un altísimo 87.6% como porcentaje de KO fue el legado que nos dejó Rocky Marciano.
Rocky Marciano y un récord compartido
Dicen que los récords están para romperse, y parece que el que poseía Marciano ya lo comparte junto a Tyson Fury, quien el pasado sábado 23 de abril, tras anunciar su retiro, ganó su última pelea ante Dillian Whyte, despidiéndose como Rocky Marciano: siendo campeón de los pesos pesados y con un récord invicto (32-1).
Habrá que esperar si el ‘Rey de los Gitanos’ en verdad se retiró o regresará en un futuro. Mientras tanto, Marciano y Fury pueden presumir esta distinción.