A los 35 años y con dos operaciones de cadera a cuestas, Andy Murray (66°) volvió a ganar en el Australian Open 2023 y se situó en la tercera ronda. En esta oportunidad, dio cuenta del local Thanasi Kokkinakis (159°) en una batalla que se extendió por un espacio de 5 horas y 45 minutos en el Margaret Court Arena, el segundo estadio en importancia del Melbourne Park.
Murray revirtió una desventaja de 0-2 en sets y de 2/5 en el tercero, para lograr un triunfo épico en el que necesitó de toda su experiencia y jerarquía de ex número 1 del mundo. Su adversario terminó frustrado porque sintió muy de cerca la victoria y no pudo concretarla. Puro mérito del tenista británico, quien nunca se dio por vencido.
Finalmente, Murray se impuso por un marcador de 4/6 6/7(4) 7/6(5) 6/3 y 7/5, en un encuentro que culminó durante la madrugada australiana. El jugador escocés exhibió un tenis fantástico, acompañado de un espíritu de lucha encomiable y de una mente ganadora. Enfrente tuvo un rival potente y 9 años más joven, que lo exigió al límite y mucho más.
En la rueda ianugural, Murray había eliminado en cuatro horas y 50 minutos al italiano Matteo Berrettini (14°) también en 5 capítulos, definido por 10-6 en el tie break decisivo. Su próximo adversario en el Australian Open será un viejo conocido: Roberto Bautista Agut (25°), con quien se enfrentó en 6 oportunidades (3-3). El tenista español también tuvo que remar para deshacerse en casi 3 horas del qualy estadounidense Brandon Holt (215°) por 4/6 2/6 6/3 6/2 y 6/2 en el Court 7 del Melbourne Park.
Hay un antecedente curioso, todavía fresco, entre los dos aspirantes a los octavos de final: en la rueda inaugural de la edición 2019 de este mismo certamen, Murray fue superado en 5 mangas por Bautista Agut. Posterior a aquel cotejo, Andy manifestó que ese sería su último match como profesional. Sin embargo, después recapacitó y optó por someterse a la segunda cirugía de cadera, para proseguir con su carrera una vez recuperado. Está operado de las dos caderas el oriundo de Glasgow, cada una con implante metálico.
Viejo es el viento y sigue soplando es una frase archiconocida, pero sirve para explicar este presente de Andy Murray. Muchos especialistas opinaron en estos años que el escocés debía retirarse, pero es el tenista el que decide cuando poner fin a su trayectoria, en este caso de las más ricas del deporte blanco.