Novak Djokovic (1°) debutó con un trabajoso triunfo en el ATP 250 de Belgrado (arcilla/outdoor) y se recuperó de la derrota sufrida la semana pasada en su estreno en el Masters 1000 de Montecarlo. Posteriormente, el tenista serbio se despachó con una contundente declaración acerca de la determinación que tomó Wimbledon de apartar de su cita a sus colegas rusos y bielorrusos, a causa de la política militar del gobierno de Rusia (con el apoyo de Bielorrusia) en perjuicio de Ucrania.
Tras superar ajustadamente a su compatriota Laslo Djere (50°) por 2/6 7/6(6) y 7/6 (4), que le demandó tres horas y 21 minutos de intensa lucha, Djokovic manifestó en la conferencia de prensa que no está de acuerdo con la exclusión de participar en la próxima edición de Wimbledon a los tenistas rusos y bielorrusos. Claro, directo y sin rodeos fue Nole en su opinión sobre lo resuelto por el Grand Slam británico, una competencia qus supo conquistar en 6 oportunidades, la última en 2021.
Djokovic expresó lo siguiente ante la pregunta sobre el tema: “Siempre condenaré la guerra. Yo sé, como niño que vivió la guerra, cuantos traumas emotivos deja y que el pueblo civil es el que más sufre. En los Balcanes tuvimos muchas guerras en la historia reciente. Por ese motivo, no puedo apoyar la decisión de Wimbledon porque los atletas no tienen nada que ver con eso”. Uno de los tenistas afectados sobre la medida es su escolta en el ranking ATP, el ruso Daniil Medvedev (2°).
En cuanto a lo estrictamente deportivo, Djokovic resaltó el valor de la difícil victoria ante Djere, sobre todo en el aspecto mental, clave para su confianza. Su próximo compromiso será ante otro jugador serbio, Miomir Kecmanovic (38°), vencedor del australiano John Millman (80°) por 6/4 y 7/6(5). El cotejo está programado para el jueves a la tarde en Court Central del Novak Tennis Center, club del cual el líder de la clasificación es propietario, al igual que del certamen.