Parafraseando a Jean Monnet, la gente se va y las instituciones quedan, lo mismo pasa en el fútbol y en la vida.
Eso sí, hay ausencias más relevantes que otras y claro que la realidad del fútbol son los jugadores y siempre serán los más extrañados. Los técnicos a lo largo de la historia fueron ganando protagonismo hasta ser catalogados prácticamente como estrellas.
Ahora vivimos en plena definición de La Liga española un dilema y con gran expectativa esperamos decisiones sobre el futuro de los técnicos de los dos equipos que paralizan el mundo cuando juegan entre sí.
El Real Madrid y el Barcelona con campañas diferentes y con un equipo merengue que se mantuvo vivo hasta el final, parecen tener que tomar un nuevo rumbo en cuanto a dirección técnica para la próxima temporada.
Aunque ganó Copa del Rey y llegó en un momento convulso para la institución azulgrana, Ronald Koeman está a punto de ser despedido, su final de torneo no ayudó y principalmente no es el técnico del presidente Joan Laporta quien se inclina por que Xavi Hernández tome las riendas del equipo.
Vale la pena recordar que Koeman ya era el técnico cuando ganó elecciones Laporta.
Por los lados del Madrid, Zinedine Zidane habría anunciado que se va, después de lo que ha sido otra etapa exitosa para el al frente del conjunto merengue y aunque Massimiliano Allegri suena como su más probable reemplazante, Raül también tiene muchos adeptos y cumple con un buen trabajo en el Castilla.
Uno porque no es del riñón del presidente y otro porque considera que este nuevo ciclo se acabó, los dos verán el final de esta etapa o al menos así pinta el panorama.
Hay quienes somos enemigos acérrimos de dramatizar. Nada es tan terrible, y mucho menos que se vaya un técnico.
Los equipos siempre serán más importantes y quedarán ahí, existiendo en el diario vivir del
fútbol y los técnicos van y vienen independientemente de éxito o fracaso.
Sí, claro que es noticia y genera expectativa, pero serán los jugadores los que como siempre nos deleitarán con la pelota, ellos son la realidad del fútbol.
Recordemos siempre que más allá de quien dirija, los que no se van son los equipos y Real Madrid y Barcelona seguirán paralizando al mundo y con la lupa del orbe futbolístico por los siglos de los siglos.