Después de ser arrestado por la policía de California bajo un cargo grave por haber producido lesiones corporales a su pareja, Julio Urías, lanzador de Los Ángeles Dodgers, ahora es parte de una investigación de la Major League Baseball.
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A sus 27 años, el lanzador de Culiacán, Sinaloa, pone en riesgo su continuidad en la “Gran Carpa” debido a su presunta agresividad plasmada en la violencia doméstica ejercida en contra de Daysi Pérez.
El domingo por la noche el pelotero fue detenido por agentes del Departamento de Seguridad Pública en el Exposition Park, inmueble ubicado al Sur de Los Ángeles, California.
Sin embargo, Julio Urías quedó en libertad gracias al pago de una fianza de $50 mil dólares y ahora deberá comparecer ante la Corte el 27 de septiembre.
Al respecto, Dave Roberts, manager de Los Ángeles Dodgers, no se atreve a pronosticar que le depara al pitcher mexicano, pues en gran parte su futuro depende de la sanción que pudiera recibir por parte de las autoridades.
“Para nosotros, se trata de una situación que analizaremos día con día. No quiero adelantarme demasiado. Al analizar cómo se han desenvuelto ciertas cosas, uno aprende que la mejor manera de manejarlas es día a día”, expresó.
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Cabe mencionar que es la segunda ocasión en la que Urías viola la Política Conjunta de Violencia doméstica, Asalto Sexual y Abuso de Menores de la Major League Baseball (MLB) y por ello su carrera está en riesgo sobre todo porque su contrato con los Dodgers expira al final de la temporada.
En 2019, el pelotero fue denunciado por presuntamente arrojar a una mujer contra un automóvil, lo cual le significó una suspensión de 20 juegos, algo nada grato para cualquier equipo que lo contemple como posible refuerzo para la siguiente campaña.