Bill Phillips y su esposa, Maria Phillips, decidieron compartir, a través de las redes sociales, su lenta, pero firme recuperación tras las fuertes secuelas que le ha ocasionado esta enfermedad tras contraer COVID-19 por segunda ocasión y no estar vacunado.
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La historia de la impactante deterioro del entrenador personal tras contagiarse de nueva cuenta se ha vuelto viral en días recientes. Sin embargo, la historia de lucha y supervivencia de Bill Phillips es digna de voltear a ver y aprender de ella. Él, es un hombre que tiene la fortuna de poder contar cómo va superando día con día la enfermedad y cómo se está adaptando a su nueva vida. Reconoce su error al no querer recibir la vacuna de COVID-19 y afirma que, de poder cambiar las cosas, lo haría diferente, pero que está feliz de estar vivo y por tener la oportunidad de renacer y, con ello, replantearse sus metas y prioridades.
Bill Phillips su historia con el COVID-19
Es un entrenador personal y autor de varios libros, entre los que se destaca Body-for-LIFE, con el que ha ayudado a millones de personas a recuperar su salud con un plan de alimentación y ejercicio adecuados. Asimismo, con más de 25 años experiencia, ha brindado consejos prácticos y muy útiles en programas de televisión y cuenta, además, con su aplicación fitness oficial.
En su página, Bill señala que “Para estar saludables y mantenernos así, sí, necesitamos hacer ejercicio y comer bien. Pero a menudo también necesitamos trabajar en nosotros mismos ‘más allá del cuerpo'[…] Debemos cambiar nuestra forma de pensar y curar los golpes y moretones emocionales que causan los estilos de vida invariables de hoy”.
Al parecer, en estos últimos meses él mismo ha sido su mejor discípulo, ya que ha tenido que poner en práctica cada uno de sus consejos. En enero de 2020, Bill contrajo coronavirus (COVID-19) y, por fortuna salió bien librado y sin mayores contratiempos. No obstante, al estar recuperado, consideró que su cuerpo había generado suficientes anticuerpos y que no era necesario vacunarse, razón por la cual decidió no hacerlo.
Año y medio más tarde, en junio de 2021 volvió a contraer COVID-19 agravándose su condición a tal grado que tuvieron que intubarlo durante 47 días e induciéndolo en estado de coma para contrarrestar los efectos que el virus estaba ocasionándole internamente.
El entrenador de 56 años logró vencer el COVID-19, salir del coma e inició una dolorosa y agotadora rehabilitación hace menos de un mes y que, como su esposa, María Phillips lo señala: “será un largo camino y estoy muy agradecida por la oportunidad de ser parte de su recuperación…un día a la vez: progreso = éxito.”
Tras salir del coma, Bill Phillips perdió cerca de 32 kilos en 45 días, quedó sumamente débil y tuvo que aprender todo desde cero. Afortunadamente, gracias al apoyo incondicional de su esposa y del personal médico del Hospital St. Anthony, su rehabilitación ante el COVID-19 ha sido constante y fructífera. Durante la segunda semana de agosto pudo dar sus primeros pasos solo y actualmente ya puede realizar levantamiento de pesas ligeras, hacer prácticas con el balón y moverse un poco más rápido. Sin embargo, no puede estar todavía más de un minuto sin oxígeno suplementario.
“A diferencia de la construcción muscular, la rehabilitación por COVID-19 implica mucha fuerza de paciencia y humildad, no de la bravuconería. No estoy seguro de cuándo volveré a los ejercicios convencionales de levantamiento de peso. No estoy interesado en ello, por ahora. Agradezco estar vivo y muchas de mis prioridades y metas de vida han renacido”, afirmó.
En la entrevista que Bill y Maria Phillips dieron para 9 News, ambos compartieron el largo y doloroso camino que han recorrido debido al COVID-19. Para ella, ha sido muy difícil ver a una persona fuerte y saludable débil y a punto de perder la vida. Él, por su parte, se arrepiente de manera categórica el no haberse vacunado y de causarse todo ese daño a sí mismo y a su esposa. Ambos coinciden en que si su historia logra alentar a que la gente se vacune y se inspire en cómo él ha salido adelante se dan por satisfechos y, es por ello, que seguirán compartiendo su recorrido hacia su recuperación.
Bill recibirá la primera dosis de la vacuna contra el COVID-19 el día de su cumpleaños, el próximo 23 de septiembre y, mientras tanto, continuará con su rehabilitación y cosechando victorias un día a la vez. “Prefiero entrenar para estar saludable, no sólo vivir para entrenar. Si me preguntas ahora mismo, preferiría bailar en la playa con mi esposa que aguantar una sesión de spinning. Necesito un cuerpo para vivir”.