Melbourne (Australia), 12 feb (EFE).- El ruso Aslan Karatsev se convirtió en la figura sorpresa de la quinta jornada tras superar al argentino Diego Schwartzman (8) por 6/3 6/3 y 6/3 en la tercera ronda del Abierto de Australia, después de acceder desde la fase previa por primera vez al cuadro principal de un Grand Slam. El vencedor figura en la 114° colocación del ranking ATP.
No se equivocó su compatriota Daniil Medvedev (4), quien estuvo entrenando con él durante la semana en que consiguieron el título de la Copa ATP, al advertir del potencial de Karatsev y definirle como “el arma secreta del equipo”.
También avisó su otro compañero Andrey Rublev (7) al comentar en rueda de prensa que ya demostró “un gran nivel a finales del año pasado” y que iba a ser “un partido muy interesante ante el argentino”, así como que tendría sus opciones.
En sus primeras dos rondas, Karatsev resolvió con solvencia -en la segunda tan sólo concedió un juego ante el bielorruso Egor Gerasimov– y en su tercer reto se quitó de encima con facilidad a Schwartzman, la principal esperanza argentina, que cayó por primera vez en su carrera ante un jugador procedente de la previa.
El propio Schwartzman comentó entre risas, cuando todavía no conocía lo que iba a acontecer, que tendría que ponerse casco para recibir los cañones del agresivo jugador ruso, que proseguirá su camino en el Melbourne Park y se enfrentará en la siguiente ronda a Felix Auger-Aliassime (20), vencedor por 7/5 7/5 y 6/3 de Denis Shapovalov (11) en el choque entre canadienses,.
Con su victoria sobre el octavo favorito del Abierto de Australia, Karatsev se convirtió en el quinto tenista desde el año 2000 en alcanzar los octavos de final en su debut absoluto en un Grand Slam. Recién a los 27 años pudo acceder a una competencia de esta magnitud y vaya si lo está aprovechando el oriundo de Vladikavkaz.