El seleccionado nacional arribó a la Serie A con el único objetivo de ser suplente. El exjugador del América estaba consciente de lo que su nuevo equipo, el Salernitana quería de él y aún así aceptó hacerlo. Esto fue revelado por el entrenador del equipo, Davide Nicola.
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Dichos comentarios los realizó tras la última derrota de Salernitana contra el Hellas Verona en la jornada 22 de la Serie A. El encuentro culminó con una derrota de un gol a cero y nuevamente, el ex águila fue ampliamente criticado:
“Contrataron a Ochoa para darnos una mano hasta el regreso de (Luigi) Sepe. Es un rol particular y aquí hay jerarquías; Sepe ya tomó su lugar y con razón. Tenemos dos porteros excelentes y si la Juve rota a sus porteros, no sé por qué no podemos nosotros”, decretó Nicola en conferencia de prensa.
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Durante su estadía, Ochoa ha jugado seis partidos y en ellos ha permitido que 17 goles entren a su portería. A pesar de su buen desempeño en ciertas instancias, el arquero del conjunto tricolor ha tenido la misma suerte que cuando jugó para el Ajaccio y el Granada. Y la declaración de su ahora ex entrenador quién fue despedido el 15 de febrero, no ayuda en nada.
Ochoa está acostumbrado a la banca
Tras la Copa del Mundo del 2014, Guillermo Ochoa llegó al Málaga. En aquel momento de su carrera, el mexicano estaba pasando por su mejor momento y arribó a España para ser uno de los referentes.
Sin embargo, su realidad cambió rápidamente porque no supo competir con el el camerunés Carlos Kameni, que en los papeles tenía que ser el sustituto de Ochoa.
Por su parte, Kameni se mostró hostil ante su competidor y buscó hacer todo lo posible para complicarle su tiempo en España: “No existe relación alguna entre nosotros, es inexistente. Hubo diálogos profesionales a su llegada. Después del segundo partido ya no me habló, me dijo ‘hola. ¿Qué tengo que hacer?”.
“Pero sigo trabajando y la vida no se detiene allí. Me llevo muy bien con todos los demás compañeros de equipo, con el personal. Así que no me fijo en ello y hago lo que tengo que hacer”, contó Kameni al portal francés So Foot en 2015″.
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Hasta el 2016 Ochoa pudo hacerse de la titularidad tras migrar al Granada, pero su momento bajo el sol no duró por mucho tiempo. Su plantilla descendió y acumuló dos récords que le pintan de cuerpo entero: portero más goleado en la historia de La Liga y portero con más atajadas en la historia de un torneo de la Liga.
Tras el fracaso en el Granada, pasó al Standar de Lieja, equipo en el que olvidó el martirio de la parta baja de la tabla, pero siempre en el marco de un futbol menos competitivo, como lo es el de Bélgica.
Actualmente, el mexicano está luchando por no descender y no perder su lugar en el equipo. El despido de Nicola solamente servirá para profundizar el limbo en el cuál se encuentra y que a sus 37 años, podría simbolizar el inicio del final de su carrera profesional.
