De una derecha demoledora, escurridizo y con un gran corazón para enfrentar a sus rivales, hablar de Salvador Sánchez es recordar a uno de los mejores exponentes del boxeo mundial, uno que perdió la vida trágicamente. Un gran campeón mexicano, quien también estaba orgulloso de su herencia hispana.
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- Biografia Salvador Sánchez Cleto Reyes
Nacido el 26 de enero de 1959, en el pueblo de Santiago Tianguistenco, en el Estado de México. Conoció el cuadrilátero por la lucha libre pero al ver la fuerza de sus impactos Agustín Palacios lo convenció de volverse boxeador.
‘Don Agustín’ era conocido por su gran ‘ojo’ como manager de boxeadores jóvenes, ya que logró abrir las puertas tanto a Salvador Sánchez como a ‘Chucho’ Castillo. Su olfato lo llevó a siempre tomar buenas decisiones. Reclutaba a pugilistas de calidad y su compadre, Gerónimo Eleuterio ‘Coneja’ López era quien los desarrollaba arriba del cuadrilátero.
Desde sus inicios en el pugilismo demostró gran calidad y enorme autoridad a la hora de enfrentar a los rivales. Una verdadera máquina de tirar puños, con una condición física brutal y un don especial para eludir los ataques y contragolpear con un poder demoledor.
En 1980, Sal Sánchez ganó el cinturón mundial del CMB en la categoría pluma después de vencer a Dany “Coloradito” López en 13 asaltos, recordando que en esa época los combates de campeonato mundial se competían a 15 rounds. Ahí comenzarían sus muy celebradas 10 defensas del cetro.
Venció a los mejores exponentes del mundo en su divisón y con gran autoridad. Derrotó a peleadores como Rubén Castillo, Pat Ford, Juan Laporte, Rocky García, Danny López (en la revancha), Roberto Castañón, Azumah Nelson y, por supuesto, la más vitoreada ante el puertorriqueño Wilfredo ‘Bazooka’ Gómez.
Salvador Sánchez vs Wilfredo Gómez
Esta pelea merece una mención por separado, y es que el boricua Wilfredo Gómez fue el rival más complicado para Sánchez. El originario de San Juan, Puerto Rico, considerado por muchos como el mejor súper gallo de la historia, subió de categoría para enfrentar al mexicano.
El “tres veces campeón mundial” y el mexiquense se vieron las caras el 21 de agosto de 1981, en el Caesar’s Palace de Las Vegas, una velada que los asistentes nunca olvidarán, ya que presenciaron tal vez la cúspide boxística de la breve carrera profesional de Sal Sánchez.
Gómez, el mejor boxeador puertorriqueño del momento, sintió desde el primer minuto la pegada de Sánchez y besó la lona en el primer capítulo, después de un derechazo de Sánchez ante el vitoreo de la afición.
“Tómate una foto porque después de la pelea no te van a reconocer”, mencionó Wilfredo a Salvador Sánchez antes de entrar a la pelea. “Hablaré en el ring” contestó el mexicano y así fue, en una guerra dentro del cuadrilátero Sánchez venció con autoridad a Gómez en ocho episodios y terminó con el imperio de 32 triunfos de ‘Bazooka’, en la que derrotó a mexicanos como Carlos Zárate y Juan Antonio López.
La conmoción de caída de Wilfredo en Puerto Rico fue tal que mucha gente no trabajó al día siguiente, el mismo Gómez no salió de su cuarto de hotel para ser atendido por los médicos después de la paliza que recibió. Aún no podía creer que quedó de rodillas ante el campeón mexicano.
Solo la muerte pudo quitarle el título
Después de la pelea contra Wilfredo Gómez, Sánchez se convirtió en el ídolo máximo de México, sus peleas se convirtieron en un espectáculo de la mayor relevancia, todos se sentaban para ver a Sánchez. Cuatro meses después de la batalla contra Gómez enfrentó y venció a Pat Cowdell en el Astrodome de Houston.
En Dallas, el 8 de de mayo de 1982 venció a Rocky García en una gran batalla que acabó con decisión unánime, nueve defensas consecutivas de su cetro mundial y cada vez mejoraba aún más, lo cual era una mala noticia para sus rivales. A sus 23 años de edad, Salvador era la gran figura del boxeo hispano.
Lo que nadie sabía es que el 21 de de julio de 1982 fue la última vez que Salvador Sánchez boxeó sobre el cuadrilátero, en el Madison Square Garden de Nueva York, en una gran exhibición ante Azumah Nelson. Sánchez noqueó a ‘El Profesor en el round 15 tras mandarlo a la lona con una combinación de ganchos de zurda y luego agobiarlo con una retahíla de derechazos.
Ante un estruendoso aplauso y loas para el mexicano, Sal se despedió de Nueva York y de su público por última ocasión.
Un 12 de agosto de 1982, mientras Salvador Sánchez se preparaba para su segunda contienda ante el boricua Juan Laporte, una tragedia ocurrió… En el kilometro 12 de la carretera Querétaro/San Luis, un lujoso Porsche 982 se estrelló con un par de automóviles en un intento por rebasar.
El conductor de aquel vehículo que se hizo pedazos era Salvador Sánchez. El ídolo mexicano falleció al instante del impacto. México y el boxeo mundial perdieron a uno de sus más grandes campeones.
Según relatan sus entrenadores, un día antes Salvador Sánchez lucía desencajado, nadie supo la razón por la que iba a San Luis, solo tomo las llaves y con el pretexto de ponerle un nuevo equipo de audio a su vehículo salió a carretera. Fue su último viaje.
“Campeón y estrella del mundo, amigo y buena persona, famoso por su pegada, por los que puso en la lona, pero la muerte de pronto le arrebató la corona” así cantan los Broncos de Reynosa en su corrido en honor a la leyenda de Salvador Sánchez, el gran campeón mexicano.
(Foto: Twitter @boxinghistory)