Los problemas de Novak Djokovic no terminan con su deportación de Australia y su no participación en el Australian Open. El serbio tendrá problemas para participar en el Roland Garros (French Open) y el US Open, que se disputarán en mayo y agosto-septiembre respectivamente.
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El tema de Djokovic con las vacunas ha sido la primera gran polémica del deporte en este año, el serbio no pudo disputar el Australian Open al no estar vacunado, generando discusiones a nivel médico, político e incluso ético en todo el mundo, principalmente. Finalmente, el tema terminó con la deportación del tenista, negándole su participación en el primer Grand Slam del 2022.
Roland Garros y el US Open en riesgo
Pese a toda la polémica que ha vivido Djokovic, esto podría ser tan solo el inicio, ya que el gobierno francés anunció que los deportistas deberán tener su esquema de vacunación completo, siendo un gran impedimento para el deportista.
“Desde que se promulgue la ley, será obligatorio la vaunación para entrar en los espacios ya sometidos al pasaporte sanitario (estadios, teatros o salones) para el conjunto de los espectadores, de los practicantes, de los profesionales, franceses o extranjeros”, declaró Roxana Maracineanu, Ministra de Deportes.
Mismo caso el del US Open, al no estar vacunado, seguramente se le negaría la entrada a Estados Unidos, perdiéndose el cuarto Grand Slam del año. Otros torneos importantes que no podría disputar son el Masters de Montecarlo, París, Indian Wells, Miami, Cincinnati, entre otros.
Wimbledon, la única esperanza
Si finalmente Djokovic se mantiene firme en su decisión de no vacunarse, el único Grand Slam que tendría posibilidades de disputar este año es Wimbledon, que se jugará en Londres entre junio y julio, pudiendo entrar a Reino Unido, pero teniendo que realizar cuarentena obligatoria.
El panorama a corto plazo parece muy complicado para el serbio, que deberá tomar una decisión importante en los próximos meses. Mantener su ideología y no vacunarse, pero arriesgarse a no disputar la mayoría de competiciones importantes del año, o renunciar a sus principios para jugar los grandes torneos y luchar por mantenerse en el top 1.
Lo que queda claro es que nadie en la opinión pública ha quedado indiferente frente a lo ocurrido por Djokovic, muchas personas están a favor de que haya sido deportado, y el otro lado apoya la libertad del tenista, de poder elegir si se vacuna o no.