Una vez más, los Chicago White Sox se quedaron sin llegar a tierra prometida dentro de la postemporada de las Grandes Ligas teniendo a un róster repleto de puro talento con una de las ofensivas más envidiables bajo las órdenes del legendario Tony La Russa.
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Los de la Ciudad de los Vientos quedaron mucho a deber en la cursante campaña de la MLB al ser eliminados en la Serie Divisional en cuatro juegos por los Houston Astros, quienes no tuvieron compasión para apagar las ilusiones de una afición que contemplaba a este equipo como uno de los grandes favoritos a la Serie Mundial, la cual les ha sido negada desde la lejana coronación de 2008.
Con todo a su favor, los White Sox siguieron demostrando su peligrosidad al bateo durante la temporada regular para terminar en la cima de la Central de la Americana luego de 13 años con un récord de 93-69; sin embargo, las condiciones no se prestaron en el momento que más lo requerían, dejando nuevamente a la afición de Chicago con la interrogante del por qué este no fue el año indicado en el que tocarían el cielo.
Ya son tres postemporadas desde ese último ‘Clásico de Otoño’ en que la franquicia de Chicago no gana una sola serie, y es que si analizamos nombre por nombre, esta era una plantilla hecha a la medida con un José Abreu, un Luis Robert, un Eloy Jiménez, un Yoan Moncada, entre otros; vaya, ¿qué más pueden pedir los White Sox?
#ChangeTheGame one hit at a time. pic.twitter.com/O39Dy10pmR
— Chicago White Sox (@whitesox) October 11, 2021
Es que nadie tenía contemplado este escenario para este equipo comandado por un Salón de la Fama que salió del retiro y que se encuentra viviendo su segunda etapa al frente de los White Sox; por lo que es evidente que para todo el alrededor de la novena, esta campaña no dejó de ser una decepcionante historia.
Sin embargo, por más que la presión cada vez sea mayor, hay que tenerles paciencia, porque como se comentó anteriormente el talento ahí está, eso nadie lo puede negar, tanto al bate como en el montículo; y eso fue fruto del trabajo de esta temporada regular, en la que La Russa los guió a su mejor porcentaje de victorias desde 2005 con .524.
Para muchos de los aficionados, la llegada del mánager 77 años no sentó nada bien en principio, pues con la preocupación sobre el trato que tendría con los jóvenes peloteros y la polémica que involucró a Yermín Mercedes a mitad de la campaña, el panorama no pintaba bien en el dogout, pero su experiencia lo fue perfilando a hacer los ajustes necesarios ante las bajas de Jiménez y Robert en un punto clave de la temporada, que al final de cuentas se quedó en su poder.
“No voy a hablar de mí mismo”, comentó La Russa en su momento durante una conferencia de prensa. “El proceso que he seguido, una vez que he tenido un poco de seguridad, incluye la pregunta de si el equipo me quiere de regreso. Me marcho sólo cuando no me quieren. Si dicen que sí, hay que preguntarles a los jugadores. Ellos deberían decidir a quién quieren”.
Ahora, con los diferentes medios que apuntan a que La Russa seguirá con los White Sox, su modelo de oportunidad es mejor que a la que uno pueda imaginarse, pues si mantiene las mismas cartas en la ecuación, no debería de sorprendernos que en un par de años, finalmente, se cumpla la profecia siendo que en una próxima temporada, este equipo llegará más fortalecido mentalmente y, estará listo para encararse con quien se cruce en el camino.