Crear es necesario para innovar, sobre todo cuando se trata de sneakers. Esto lo comparte Joe Foster, cofundador de Reebok, una de las marcas de ropa y calzado deportivo más famosas del orbe, en su libro Crea Sneakers, mismo que presentó en la Ciudad de México.
Todo comenzó en un pequeño taller, hace 31 años, en el que trabajaban cuatro personas, quienes desarrollaron todo un concepto que logró establecerse como un estandarte de la cultura popular, no solo del Reino Unido, sino mundial.
El recorrido para que estos sneakers se establecieran en el mercado global no tuvo certezas. Los hermanos Foster, Joe y Jeff, simplemente decidieron hacer a un lado el negocio familiar y emprendieron un pequeño taller de calzado deportivo y fue de esta manera que, 31 años después, consiguieron posicionarse.
Innovar, aprender de los errores y mantenerse firmes con un objetivo en mente son algunas de las claves del éxito de los creadores de Reebok, quienes supieron siempre salir avante ante las dificultades y los retos
“Quizás si hubiera tomado decisiones diferentes habría llegado antes, pero estoy seguro de que sin el largo y serpenteante viaje no habría estado preparado para llegar al destino”, comentó Joe durante la presentación de su libro Crea Sneakers.
Julie Foster, quien es la directora general de JW Foster Heritage, destacó la historia de su familia como artesanos del calzado deportivo y de la relevancia de la marca en la cultura popular. Además, comentó que también es un símbolo de la equidad de género y que se preocupan en representar la fortaleza femenina en sus diseños.
Lecciones para “hacer sneakers” y cualquier otra empresa
En Crea Sneakers, Joe Foster resalta seis lecciones que, desde su experiencia, cualquier emprendimiento debe aplicar:
- Toma decisiones sin limitarte a las reglas impuestas.
- Entiende que cuando algo se asume como imposible no significa que no se pueda hacer.
- Nunca ejes que alguien aplaste tus sueños, aunque sea alguien que amas.
- Registra tu marca y patenta tus ideas, aunque nadie crea en ellas.
- Observa y escucha a tus clientes… y también a quienes no lo son.
- Confía en las personas, pues muchas de ellos son como porteros de nuevas dimensiones.
“Yo prefiero confiar en las personas; desconfiar no te abre puertas. No se trata de ser ingenuo, se trata de estar abierto y entender que la señorita suerte puede estar de tu lado si abres la mente y amplías tu visión de negocio. Las personas son las que te van a ayudar a crecer; tocan tu puerta y, si las dejas pasar, te abren otras puertas. Eso significa también compartir”, compartió Foster.