En una época en que el término de “Dream Team” suele acompañar a los equipos del baloncesto masculino de Estados Unidos en los Juegos Olímpicos, pues el boxeo estadounidense también…
Sugar Ray Leonard (Foto; www..aiba.org)
En una época en que el término de “Dream Team” suele acompañar a los equipos del baloncesto masculino de Estados Unidos en los Juegos Olímpicos, pues el boxeo estadounidense también tuvo su versión en una justa olímpica aunque en ese momento ni siquiera se imaginaron que sería así.
Estados Unidos presentó hace 45 años lo que ha sido considerado la mejor escuadra del boxeo de la historia en los Juegos de Montreal 1976 luego que lograron cosechar siete medallas, incluyendo cinco de oro, y luego casi todos continuaron sus éxitos en el profesionalismo.
Repasemos ese equipo de ensueño de los cuadriláteros:
Ray Leonard deleitó al público en suelo canadiense con su relampagueante velocidad de manos y derrotó en la final del peso junior welter al experimentado púgil cubano Andrés Aldama por 5-0.
La actuación de Leonard marcó el nacimiento de una estrella por su talento en el ring y carisma fuera del mismo. Sugar se convirtió en una leyenda en la década de los 80 ganando cinco títulos mundiales en igual número de categorías con victorias sobre otros grandes como Wilfredo Benítez, Roberto “Mano de Piedra” Durán, Tommy Hearns y Marvin Hagler.
Además, fue el primer boxeador en ganar más de 100 millones en su carrera dentro del ring.
No se pueden separar a estos dos púgiles que hicieron historia al convertirse en los primeros hermanos boxeadores en ganar oro en uno mismos Juegos Olímpicos. Michael conquistó oro en el peso mediano al derrotar al soviético Rufat Risklyev y Leon hizo lo propio en el peso semipesado al superar al cubano Sixto Soria.
Los Spinks entonces volvieron a hacer historia al convertirse en monarcas en el peso pesado. Leon tuvo su gran momento cuando venció a Muhammad Ali con apenas ocho peleas como profesional en 1978.
Michael, por su parte, fue uno de los mejores campeones semipesados desde 1981 al 1985 antes de subir a la máxima división y derrotar a Larry Holmes en 1985.
El peso ligero fue una de las grandes historias de los Juegos en Montreal y ganó el oro una semana después que murió su madre al superar al rumano Simion Cutov en la final del peso ligero. Fue nombrado el mejor boxeador del torneo superando así a Leonard y los hermanos Spinks.
Los expertos coincidían de que Davis Jr. tenía todo pare ser mejor peleador que Sugar Ray Leonard, pero su carrera profesional nunca pudo igualar la gloria olímpica.
Perdió en sus tres intentos por ceñirse una corona mundial, primero por decisión unánime ante el escocés Jim Watt en 1980, luego ante el boricua Edwin Rosario por decisión dividida en 1984 y al final contra Buddy McGirt por nocaut en 1988. Se retiró casi 20 años después de su momento glorioso.
Fue quizás el medallista de oro menos conocido del grupo, pero tuvo una excelente carrera amateur y culminó la misma con una victoria en el peso pluma sobre el cubano Ramón Duvalón.
Cuando entró al campo profesional también conquistó un cetro mundial en el 16ta pelea, pero la alegría le duró poco y perdió el título en su primera defensa titular ante el argentino Sergio Palma y decidió colgar los guantes apenas a los 22 años.
El soldado del ejército de Estados Unidos con sólo 32 peleas como amateur perdió en la final del peso gallo ante el norcoreano Gu Yong-Ju, pero a diferencia de sus otros compañeros de equipo no entró al profesionalismo.
Siguió una carrera en las fuerzas armadas y cuando se retiró, se convirtió en entrenador de boxeo.
“Big John” como era llamado debido a su estatura de 6’4” tuvo que conformarse con el bronce en los pesos pesados luego de perder por nocaut en el primer asalto en las semifinales ante la leyenda cubana Teófilo Stevenson.
Después de los Juegos Olímpicos se convirtió en profesional y tres años después conquistó el título del peso completo al derrotar al sudafricano Gerrie Coetzee.
Sin embargo, su reinado llegó a un final en su primera defensa cuando fue noqueado de un solo golpe por Mike Weaver faltando 45 segundos para terminar el 15to. asalto. Luego fue noqueado en su siguiente combate por Trevor Berbick, y aunque ganó sus próximas 14 peleas, nunca recibió la oportunidad para recuperar el cetro y se retiró después de sufrir su tercera derrota.
No hay dudas que cuando se mencionan los Juegos de Montreal 1976, muchos lo recordarán por el equipo de ensueño que tuvo una sensacional actuación.
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