LAS VEGAS. – UFC 266 tiene de todo y para todos. Aparte de dos peleas titulares con un campeonato de por medio, tendrá el retorno de un viejo conocido de la afición del MMA, Nick Díaz, para una largamente esperada revancha ante Robbie Lawler.
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La pelea estelar que cierra la International Fight Week, con el choque por el título ligero del UFC entre el retador mexicoamericano Brian Ortega y el campeón ruso Alexander Volkanovski.
“Eres un tramposo, no mereces estar aquí”, fue la frase que encendió la ira de Ortega, que le puso paños fríos a la situación diciendo que Volkanovski es el campeón y que por algo será un honor disputar el título.
Ortega llega a esta pelea luego de vencer a Chan Sun Jung en el 2002, lo que le abrió la puerta para ser designado coach de The Ultimate Fighter y pelear frente a Volkanovski por el título.
“Estas pasando muchas cosas alrededor de los deportes de combate en México, con campeones como Canelo Alvarez y Brandon Moreno. Es por eso que como mexicano debo estar a la altura de las circunstancias y hacer una buena pelea. Volkanovski es un gran peleador pero ahora es mi momento. Se acabaron las palabras, ahora solo viene la pelea”, dijo Ortega que ahora nuevamente recuperó su cabellera larga.
En otra de las peleas estelares, Valentina Shevchenko, llega con una racha de siete victorias consecutivas, se encontrará con Lauren Murphy, una retadora con ambiciones de hacer historia.
De hecho, a Shevchenko le ofrecieron una revancha frente a Amanda Nunes, si logra una victoria frente a Murphy.
Sin embargo, pese a todo lo que se ha hablado de Ortega y Volkanovski, la noticia que rodea esta cartelera fue el regreso luego de seis años del veterano Nick Diaz, para enfrentar a Robbie Lawler, a quien venció 17 años atrás en los albores del UFC.
La pelea fue movida de peso welter (170 libras) a peso medio (185). “No importa en qué división se haga. Yo vengo preparado para cualquier cosa. Tengo muchas ganas de subirme al octágono”, resumió Lawler.
Díaz es uno de los favoritos del público y no pelea desde el 2015, cuando se enfrentó al histórico Anderson Silva.
El careo final en el pesaje entre ambos veteranos del UFC fue tenso pero respetuoso.
El International Fight Week tuvo otros momentos emotivos, como la inducción del veterano canadiense Georges Saint-Pierre al Salon de la Fama.
Saint Pierre fue el monarca más dominante del peso welter hasta su retiro en el 2013. Luego de regresar brevemente para ganar el cinturón mediano frente a Michael Bisping, ratificó su retiro definitivo del MMA.
