Los récords se hicieron para romperse dicta el adagio y al menos esa parece haber sido la misión que se impusieron los seleccionados árabes antes de enfrentarse a Argentina, una selección que tras haber acumulado 36 partidos sin perder, arribó a la Copa del Mundo de Qatar con la insignia de ser una de las favoritas para levantar el trofeo al final certamen.
- LEER MÁS SOBRE: Arabia Saudita sorprende al mundo al derrotar a Argentina
- LEER MÁS SOBRE: Inglaterra despedazó a Irán en la primera goleada del Mundial
- LEER MÁS SOBRE: Enner Valencia y la primer “polémica” en Qatar 2022
Con un plantel repletó de estrellas encabezado por Lionel Messi, el representativo albiceleste además se ubicó en la tercera posición del ranking de la FIFA, sólo por detrás de Brasil y Bélgica, lo cual todavía agrandaba más su halo de excelencia.
No obstante, la noche se les vino encima a los argentinos tras no saber capitalizar un gol prácticamente de vestidor en su debut frente Arabia Saudita.
Al ponerse al frente en el marcador desde el minuto nueve ante un rival que se ubicaba en la posición 51 de la más reciente clasificación de la FIFA, los sudamericamos pasaron por alto que los partidos tienen 90 minutos y para celebrar se requiere que el árbitro haga sonar su silbato para señalar el final de un duelo.
De lo contrario, sentir superior a un adversario puede ser letal y más si practicamente éste juega como local al amparo del apoyo de miles de árabes que asistieron para verlo debutar en el primer Mundial que se efectúa en territorio árabe.
#Qatar2022 🎙️ Lionel Messi: “Sabíamos que Arabia es un equipo con buenos jugadores, que mueve bien la pelota y que adelanta mucho la línea. Lo trabajamos, pero nos aceleramos un poco”. pic.twitter.com/q6IUkgq1di
— Selección Argentina 🇦🇷 (@Argentina) November 22, 2022
Por otra parte, carecer de la idea correcta desde el banquillo para saber leer lo que sucede en la cancha y ajustar cuando se debe, es en realidad lo que hace grande a los estretagas y por lo menos frente a Arabia Saudita, a Lionel Sebastian Scaloni las cosas se le salieron de control.
Los cambios de jugadores con los cuales intentó sacudirse el demoledor golpe que le dieron en el arranque del segundo tiempo, al marcarle dos goles en menos de cinco minutos, simplemente no le funcionaron a un técnico que deberá darle la vuelta rápido a la página para tratar de sacarse la espina frente a México en su siguiente compromiso, pues si ese adversario también se le indigesta, entonces no habrá uno solo de sus compatriotas quien sueñe con mandarlo a la hoguera y todo su impecable proceso eliminatorio será una débil llamarada que sólo quedará guardada para las estadisticas, pero no para hacer historia entre los grandes.
Aunque no les guste, los argentinos ya tienen un tema para componer un nuevo tango con sede en Qatar, pero de ellos depende resurgir en los dos partidos que le restan a la Fase de Grupos y de no ser así el primero en agachar la cabeza será Lionel Messi quien increiblemente de ser considerado en su momento como el mejor jugador del mundo podría ver el final de su carrera sin haber conquistado el máximo sueño de los grandes futbolistas, levantar la Copa del Mundo.