Camerún consiguió un bravío empate 3-3 ante Serbia, en uno de los partidos más emocionantes que se han registrado hasta el momento en la Copa del Mundo de Qatar.
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De principio a fin, camerunenses y serbios apostaron por un planteamiento de juego abierto con generación de llegadas de peligro a velocidad por los costados basadas en la velocidad de sus extremos que constantemente se sumaron al frente para surtir de servicios a profundidad a los elementos de ofensiva.
Sin embargo, el representativo africano resultó más efectivo frente a la portería y al 28 de acción logró abrir el marcador a través de una jugada que inició con un tiro de esquina por el costado izquierdo hacia el corazón del área serbia, donde Nicolas N’Koulou cabeceó a segundo palo ante la incorporación de Jean-Charles Castelletto quien de frente a la portería simplemente mandó el balón al fondo de la red.
En respuesta, Serbia se volcó sobre el área camerunés y a partir de veloces triangulaciones se postró en varias ocasiones sobre el área de un adversario que sobre el final de primer tiempo bajó la guardía y tuvo un par de descuidos en su sector defensivo.
En el minuto 45, a través del cobro de un tiro libre ejecutado por Kostic desde fuera del área, el balón llegó por elevación hacia Strahinja Pavlović quien remató con la cabeza para igualó el marcador 1-1.
La anotación provocó desconcierto en la zaga camerunesa y tres minutos después recibió un segundo gol en contra mediante un disparo de media distancia de Sergej Milinković-Savić quien desde la entrada del área venció al arquero Devis Epassy.
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En la parte complementaria, después de un error de Camerún al perder un balón en la media cancha, los serbios generaron un contragolpe que les permitió infiltrarse en el área chica de su rival y después de cuatro toques el esférico quedó en los pies de Mitrovic quien empujó el balón a la red para marcar el 3-1, al 53 de acción.
Sin alternativa más allá de luchar por el empate, el técnico Rigobert Song ingresó al terreno de juego a Vincent Aboubakar y jugó hasta con cuatro hombres clavados en el eje del ataque.
Al 62 de tiempo corrido, el propio Aboubakar recibió un largo servicio desde su propia área y arrancó desde tres cuartos de cancha a toda velocidad por el centro hasta llegar a la entrada del área serbia donde, con un recorte se quitó la marca de un rival y ante la salida del arquero le bombeó el balón para ponerlo en el fondo de la red para marcar un golazo que en primera instancia fue anulado, pero después de revisar la jugada en el VAR se dio por bueno.
Dos minutos después, nuevamente Aboubakar rompió la línea defensiva gracias a un largo servicio filtrado desde su propia área que le permitió desbordar por el costado derecho hasta llegar al área chica desde donde mandó una diagonal retrasada para que Choupo Moting avallasara al arquero Milinković-Savić a través de un disparo que significó el 3-3 definitivo en el marcador.
