Madrid, 26 dic (EFE).- Después de tres días libres desde el triunfo por 0-2 en el Reale Arena contra la Real Sociedad, el Atlético de Madrid retomó este sábado los entrenamientos sin moverse de la cima de la clasificación, con la recuperación de Joao Félix y con José María Giménez y con la previsible baja de Kieran Trippier.
La competición no permite tantos días de descanso navideños como otros años ni apenas pausa en la preparación, porque la siguiente jornada de LaLiga Santander ya está a la vista, en el caso del Atlético el miércoles contra el Getafe en el Wanda Metropolitano en el partido 500 de Diego Simeone como técnico del club rojiblanco.
Ya tiene a su disposición tanto a Joao Félix, baja frente a la Real Sociedad por una faringoamigdalitis, como a José María Giménez, que ultima su puesta a punto de una lesión muscular sufrida el pasado día 1 de este mes en el choque contra el Bayern y que le ha apartado de los últimos siete partidos del conjunto rojiblanco.
El atacante portugués está listo para medirse al Getafe; Giménez también, al menos para entrar en la convocatoria del técnico, que tiene la baja por las próximas nueve semanas de Kieran Trippier, sancionado por la Federación Inglesa por ese periodo de tiempo, que incluye catorce partidos con el Atlético, el primero el miércoles.
El lateral inglés, suspendido de toda actividad relacionada con el fútbol en todo el mundo, según anunció el organismo británico, no participó en la sesión vespertina de este sábado en la Ciudad Deportiva de Majadahonda. Tampoco lo hicieron ni Héctor Herrera, con una lesión muscular, ni Ivo Grbic, aislado por la Covid-19.
Son las tres ausencias a día de hoy del Atlético para el duelo contra el Getafe del próximo miércoles.
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