Han pasado ocho meses desde que el Miami Heat “bajó los pantalones” a los Milwaukee Bucks en las Semifinales de la Conferencia del Este durante la burbuja, y ahora ambos equipos se encontrarán nuevamente.
Como el año pasado, Milwaukee es el favorito en su serie contra Miami, pero ambos equipos han experimentado cambios, y este capítulo no se parecerá a la sorpresa que Miami logró en Orlando.
La primera ventaja de la serie será para Milwaukee ya que abrirán en casa el sábado, en lugar de jugar en territorio neutral. Con los fanáticos también permitidos en estadios con capacidad limitada, se verá y sentirá una verdadera ventaja en la cancha para el equipo local, ya que tendrá cuatro juegos en su arena y Miami tendrá tres en la suya si es necesario.
Milwaukee es el segundo en rebotes en la NBA, derribando 48.3 tableros por juego, lo que inmediatamente presenta un problema para Miami, ya que es el 29no. peor equipo que ataca el cristal. Los pobres números de rebotes de Miami podrían atribuirse a los esquemas defensivos del equipo que a menudo juegan en la zona, o cuando Adebayo está extendido hacia el perímetro, el mejor reboteador del Heat está fuera de posición.
El porcentaje de victorias en la temporada regular de los Bucks no es tan alto como en los dos años anteriores, pero con la incorporación de Jrue Holiday, un jugador de dos vías de primer nivel en la NBA, Milwaukee es una bestia diferente. La presencia de Holiday agrega arrugas al plan de juego de Miami en ambos lados de la cancha.
Ofensivamente para el Heat, la carga de anotaciones del jugador más confiable de Miami, Jimmy Butler, es mucho más pesada que la última vez. Cuando los Bucks jueguen a la defensiva de hombre a hombre, espero ver a Holiday siguiendo a Butler por toda la cancha.
Holiday sobre Butler debería limitar parte de la efectividad de Butler como anotador esta vez, ya que es una mejoría a la defensiva con respecto a la temporada anterior cuando para los Bucks jugaban George Hill, Eric Bledsoe, Wesley Matthews y Kyle Korver, todos esos jugadores ante quienes Butler anotó a voluntad.
En el lado defensivo del Heat, la estrategia efectiva de tapar la pintura cada vez que Giannis Antetokounmpo penetra en el interior puede no ser tan efectiva en esta serie. La estrategia del “muro”, obliga al jugador que conduce con el balón (Antetokounmpo) a pasar fuera del tráfico hacia el perímetro para un compañero abierto del equipo. El problema con ese plan de juego este año es que los Bucks agregaron un jugador de calibre All-Star en el perímetro en Holiday, junto a Khris Middleton, para lanzar con efectividad cuando el balón es forzado a salir de las manos de Antetokounmpo.
Miami no es el favorito contra este oponente, sin embargo, todavía posee gran parte de su núcleo que los llevó a las Finales.
Como el año pasado, los Bucks todavía permiten que su oponente intente un alto volumen de triples (38.6 por juego) y los convierta en más del 38% desde esa área. El Heat a lo largo de la temporada regular no ha sido tan peligroso como lo fue durante la burbuja desde lo profundo, sin embargo, si Trevor Ariza, Duncan Robinson, Tyler Herro y/o Goran Dragic pueden lanzar de manera eficiente en la larga distancia, la serie se extenderá a siete juegos.
En el papel y estadísticamente, los Milwaukee Bucks son el mejor equipo, pero creo que son más amenazantes este año porque están motivados no solo por la búsqueda de un campeonato, sino también por el dolor de la vergüenza que antes provocaba una derrota en cinco juegos.
La humillación es un maestro esclarecedor. Bucks en seis.