Rafael Nadal (2°) pasó con éxito una nueva prueba en el Abierto de Australia, tras derrotar al británico de origen sudafricano Cameron Norrie (69°) por 7/5 6/2 y 7/5, en el último partido del estadio Rod Laver Arena. Con esta victoria, concretada en dos horas y 14 minutos, el tenista español avanzó a los octavos de final del certamen, en donde lo espera un viejo conocido: el italiano Fabio Fognini (17°).
Nadal fue dominador del trámite ante un rival complicado como Norrie, zurdo como él y dueño de un potente servicio. Precisamente el saque fue la base donde edificó su triunfo el segundo favorito del primer Grand Slam de la temporada. Solo lo entregó en una oportunidad, la única que soportó a lo largo del duelo. Como contrapartida, el mallorquín fue muy agresivo sobre el segundo servicio de su oponente y pudo generar 12 situaciones de quiebre, tomando 5 de ellas, suficientes para marcar la diferencia y quedarse con el acceso a la llave de la ronda de 16.
En lo que concierne a los dolores en su espalda, la lectura corporal de Nadal fue buena y se lo vio sin problemas. Tenísticamente no fue su mejor desempeño pero pudo resolver el cotejo más exigente, hasta ahora, de este Abierto de Australia. El lunes, Rafa se medirá con Fognini, con quien se enfrentó en 16 ocasiones en el circuito y primó en 12 de ellas. Será el tercer choque en un Grand Slam entre ambos, con un festejo para cada uno y nunca en esta gran cita.
Fognini, de 33 años y decimosexto preclasificado, dejó en el camino al joven Alex De Miñaur (23°), la esperanza local, por 6/4 6/3 y 6/4, en un cruce que se extendió por dos horas y 8 minutos. Gran actuación del oriundo de San Remo, que despachó al aussie de 21 años con autoridad, más allá de alguna duda sobre el final. No pudo desplegar su mejor tenis el vigesimoprimer sembrado, mérito exclusivo del experimentado itálico.