El camerunés Francis Ngannou (17-3) se consolidó como el campeón indiscutido de los completos, al vencer a su ex compañero de campamento Ciryl Gane (10-1), en la pelea estelar del UFC 270, realizado en el Honda Center de Anaheim.
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Los ex miembros de Factory MMA debieron chocar para definir al campeón absoluto de los pesos pesados, luego que Gane se hiciera con el título interino de la división al superar a Derrick Lewis.
Ngannou, por su parte, llegaba a la disputa de la última pelea de su contrato con el UFC, por lo que era vital sacar el resultado positivo.
Gané dominó los dos primeros asaltos controlando la distancia y esquivando los golpes de poder de Ngannou. Pero fue en el tercer round que al intentar propinar una patada se encontró con la reacción del camerunés que capitalizó el error del parisino, al derribarlo co un azote.
Gracias a ese mejor nivel de lucha, Ngannou se llevo el tercero y cuarto asalto.
Ya para el quinto asalto, todo parecía que dejaba a los dos peleadores con un empate en las tarjetas, Gane fracasó en ejercer una posición dominante sobre el suelo, lo cual fue aprovechado por Ngannou para lograr la monta y seguir con ventaja hasta el final de la pelea.
Gracias a esa victoria, el nuevo miembro de Xtreme Couture selló su primera defensa titular y logró su sexto triunfo al hilo, el primero en las tarjetas.
Para Gane, ademas de perder el título interino esta derrota significa su primer revés profesional.
