El legado de cada jugador que pisa la mejor duela del mundo es un recuerdo que permanecerá por los siglos de los siglos en la exaltación al Salón de la Fama, pero en la clase del 2020 con la inducción de Kobe Bryant, será un momento tan único que vivirá siempre en los corazones de todos los fanáticos y el mundo entero.
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La edición del evento que enaltece las carreras de los mejores basquetbolistas y entrenadores, vivió uno de los momentos más conmovedores en la historia del deporte, luego de que Vannesa Bryant, viuda del difunto ex-jugador de Los Angeles Lakers, aceptara la admisión de su esposo al Salón de la Fama del Baloncesto Naismith Memorial con un afectivo elogio hacia la carrera y la persona que fue Kobe donde resaltó que hasta la fecha, “todavía está ganando”.
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“Estoy segura de que en este momento él está riendo en el cielo porque estoy a punto de elogiarlo en público por sus logros en uno de los escenarios más públicos. Lo puedo ver ahora, con los brazos cruzados, con una gran sonrisa diciendo ‘No es una broma'”?, bromeó.
Vanessa, quien fuera acompañada durante sus palabras por el legendario Michael Jordan, que a su vez fue el encargado de presentar a la ex-estrella de la NBA, agradeció la presencia de quien consideraba a Kobe como “mi hermano menor”, reconociendo que era una acción muy importante para toda su familia, dad la admiración que existía entre ambos jugadores.
“El pasado mes de febrero llamé a Michael y le pregunté si introduciría a Kobe esta noche, el aceptó. Gracias por estar aquí Michael. Con lo que te admiraba, esto significa demasiado para nosotros”, afirmó.
“No tengo un discurso preparado por mi esposo porque él superó todos y cada uno de los discursos”, comentó. “Era inteligente, elocuente y talentoso en muchas cosas, incluido hablar en público. Sin embargo, sé que agradecería a todos los que lo ayudaron a llegar aquí, incluidas las personas que dudaron de él y las que trabajaron en su contra y le dijeron que él no podía alcanzar sus metas. Les agradecería a todos por motivarlo hasta llegar aquí. Después de todo, demostró que estaban equivocados”, apuntó.
Si bien una de las grandes características que tenía el llamado ‘Black Mamba’, era su ímpetu para darlo todo sobre la duela a pesar de las adversidades, recordando que cada vez que atravesaba por una lesión, lo hacía volver a aquella época en la que de niño se sentaba a mirar a Jordan: su jugador favorito, regresando en su mejor forma posible.
“La gente no lo sabe, pero una de las razones por las que mi esposo jugó a pesar de las lesiones y el dolor fue porque dijo que recordaba ser un niño pequeño, sentado en la tribuna viendo jugar a su jugador favorito”, resaltó Vanessa mientras observaba al ex-jugador de los Chicago Bulls.
“Kobe no quería decepcionar a sus fans, especialmente a los que van más arriba en las tribunas, los chicos con el mismo entusiamo que él tuvo alguna vez. Recuerdo que le pregunté porqué no podía quedarse fuera de un partido porque estaba lesionado. Él dijo: ‘¿Qué pasa con los aficionados que ahorraron para verme jugar solo una vez?’. Nunca se olvidó de sus aficionados. Los amaba mucho”, continuó.
Vanessa and Natalia Bryant receive Kobe Bryant’s official Hall of Fame Class Jacket and Ring. #20HoopClass x @Hoophall pic.twitter.com/PfBch7TCL1
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Su esposa no dejó pasar la oportunidad para agradecerle no solo por todo el arduo trabajo que entregó a lo largo de sus 20 años en la mejor liga del deporte ráfaga, sino también por su labor como esposo y padre, sintiéndose orgullosa del maravilloso ser humano que ama “por siempre y para siempre”.
“Gracias por ser el mejor esposo y padre que podrías ser. Gracias por crecer y aprender de tus propios errores”, expresó Vanessa Bryant. “Gracias por tratar siempre de ser mejores. Gracias por nunca rendirse con nosotros. Gracias por todo su arduo trabajo. Gracias por nuestra familia. Gracias por nuestras hijas: Natalia, Gianna, Bianka y Capri. Gracias por trabajar tan incansablemente para mantenernos y por darnos la vida más maravillosa juntos. Gracias por levantarte a las 4 de la mañana para entrenar, por llegar a casa para darme un beso de buenos días y dejar a nuestras niñas en la escuela para volver a entrenar”, dijo.
“Felicitaciones, bebé. Todo tu arduo trabajo y sacrificio han valido la pena”. Una vez me dijiste, si vas a apostar por alguien, apuesta por ti mismo. Me alegro de que apuestes por ti mismo, eres un gran triunfador. Lo hiciste. Ahora estás en el Salón de la Fama. verdadero campeón. No eres sólo un MVP, eres uno de los mejores jugadores de todos los tiempos. Estoy muy orgullosa de ti. Te amo por siempre y para siempre”, selló.
"You did it. You're in the Hall of Fame now. You're a true champ. You're not just an MVP. You're an all-time great. I'm so proud of you. I love you forever and always. Kobe Bean Bryant."
– Vanessa Bryant
(via @TSN_Sports)pic.twitter.com/u7lvaa6BTw
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Bryant, quien consiguiera a lo largo de su trayectoria una innumerable cantidad de reconocimientos en los que alcanzó ser el cuarto máximo anotador de toda la historia de la NBA, 5 anillos de campeonato, 2 veces MVP de las Finales, 18 veces All-Star, 4 veces MVP del Juego de Estrellas, campeón del Concurso de Clavadas, MVP de toda la liga, 2 campeonatos como máximo anotador en temporada regular y 2 medallas olímpicas, perdió la vida trágicamente en un accidente de helicóptero junto a su hija Gigi y siete pasajeros más el 26 de enero de 2020.
Por otro lado, Tim Duncan y Kevin Garnett, acompañaron al también ganador de un Oscar en la ceremonia celebrada en Massachusetts, como las tres leyendas inducidas de la NBA, donde ambos basquetbolistas apreciaron y agradecieron el reconocimiento tras la destacada huella que dejaron sobre la cancha, donde el ex-San Antonio Spurs, le dedicó este premio a su familia y a Gregg Popovich, su único entrenador en su paso por la NBA donde se consagró en 19 años con cinco anillos, dos veces como MVP, 15 veces All-Star y tres MVP de las Finales.
Tim Duncan thanks Gregg Popovich for the impact he had on his life, on and off the court. #20HoopClass pic.twitter.com/guhsWazCk9
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A su vez, Rudy Tomjanovich, exentrenador de los Houston Rockets y el universitario Eddie Sutton, formaron parte de la clase 2020 del Salón de la Fama.
La leyenda de la WNBA Tamika Catchings fue reconocida y exaltada como nueva miembra de esta inducción tras una exitosa carrera profesiona, donde logró ser seleccionada 12 veces al primer equipo, conquistó cinco premios a la jugadora defensiva del año, un MVP de la liga, un campeonato y cuatro medallas de oro olímpicas.
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“El baloncesto me eligió a mí, una larguirucha e introvertida, nacida con una discapacidad auditiva, un impedimento del habla y la voluntad de superar obstáculos, soñar en grande y cambiar el mundo”, mencionó Catchings al recibir el premio.
De igual manera, las entrenadoras de baloncesto femenino universitario Barbara Stevens, y Kim Muley, tres veces campeona nacional con Baylor, fueron galardonadas en la edición que fuera aplasada por el COVID-19.
Patrick Baumann, el exsecretario general de la FIBA, que falleció de un ataque cardíaco en el 2018, completó la lista de los nueve nuevos miembros del Salón de la Fama.