El mexicano Guillermo ‘Memo’ Ochoa fue nombrado este sábado mejor jugador de la temporada del Salernitana, un equipo que celebró con una remontada ante el Udinese su segunda permanencia consecutiva en la Serie A.
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Ochoa llegó a Salerno (sur) durante el mercado de fichajes invernal, pero media temporada bajo los palos ha sido suficiente para que su club le considere su jugador más importante del curso.
“Guillermo Ochoa, premiado como el MVP de la temporada”, anunció el Salernitana en su cuenta de Twitter.
Sus paradas determinantes en momentos clave le convirtieron rápidamente en el titular indiscutible para una segunda parte de la temporada en la que ha sido fundamental para el buen hacer del equipo sureño, que la próxima campaña cumplirá su tercer año seguido en la Serie A por primera vez en su historia.
Los partidos más importantes del mexicano sin duda fueron contra el Milán el trece de marzo cuando una brillante actuación en la portería ayudó a conseguir un importante empate, contra el Inter de Milán donde nuevamente fue factor para sacar un punto contra el finalista de la Champions League, y más recientemente en contra del Atalanta donde logró reponerse de los ocho goles que le encajaron en el partido pasado dejando su portería en cero y siendo pieza clave en la victoria de su equipo.
El meta mexicano finaliza su contrato con el Salernitana el próximo 30 de junio, pero se espera que ambas partes lleguen a un nuevo acuerdo para ampliar el vínculo por otras dos temporadas más.
El último partido de la temporada para Ochoa y su equipo.
El Salernitana celebró en su estadio la segunda permanencia de su historia en la Serie A con una remontada ante un Udinese (3-2) asentado en la zona media de la tabla.
En un partido sin nada en juego, para el Salernitana fue un día festivo con su afición al poder celebrar junto a ellos que serán equipo de la máxima categoría del fútbol italiano por tercera temporada consecutiva, algo que no habían conseguido en toda su historia y que certificaron la pasada jornada.
Pese a la alegría y el ambiente festivo en el Estadio Arechi de Salerno (sur), fue el Udinese es que se adelantó en el marcador. Lo hizo por partida doble, en los minutos 25 y 30, con tantos del neerlandés Marvi Zeegelaar y del macedonio Ilija Nestorovski.
La distancia, sin embargo, no acabó con la alegría de una afición que siguió remando con su equipo hasta que consiguió recortar distancias al ocaso del primer tiempo con un golazo del chipriota Grigoris Kastanos, que con su zurda puso el balón en la escuadra desde el pico del área.
El gol dio fuerza a los locales para el segundo tiempo y el italiano Antonio Candreva puso el empate pronto, en el minuto 57, con un lanzamiento de falta directa.
Se volcó el equipo local en ataque y, beneficiado por la expulsión de Zeegelaar en el minuto 87, encontró recompensa en el descuento con un tanto del nigeriano William Troost-Ekong que desató la esperada celebración.
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El equipo del mexicano se coloca décimo quinto con 42 puntos, ya salvado y sin nada en juego para la última jornada ante el Cremonese, también sin nada en juego. El Udinese, por su parte, se queda duodécimo, con 46 puntos, y sumó su tercera derrota consecutiva.
Sin duda la racha de diez partidos sin perder que consiguieron de finales de febrero a inicios de julio fueron de gran ayuda para mantener al equipo en la Serie A un año más.
Nota con información de EFE.
