La tibia temporada del Barcelona sigue desenvolviéndose y no de la mejor manera. La frustración está plagando al equipo dirigido por el alemán, Ronald Koen. En su último juego que perdieron 2-0 contra el Sevilla en la primera vuelta de la semifinal de la Copa del Rey, las cosas se salieron de control para Messi.
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El incidente ocurrió en el minuto 63 cuando el conjunto andaluz que ya tenía una ventaja de un tanto contra el equipo catalán. El árbitro del encuentro, Mateu Lahoz, amonestó al número 8 del equipo local por una falta cometida contra el capitán del Barcelona.
La situación escaló cuando Lionel Messi intentó quitarle el balón a Jordán, pero este se negaba entregarle el esférico al astro argentino. En el calor del momento y en el forcejeo por el balón, el número 10 del equipo visitante le soltó un codazo a la cara a Joan Jordán y esto ocasionó que se fuera directamente al suelo.
Es expulsión. Pero como es Messi, amarilla al rival no hay sea Tebas y la mafia se enfaden…
VERGÜENZA pic.twitter.com/MTHiw852se
— Real Madrid C.F.⚽ (@rmadridsite) February 10, 2021
Lo que sorprendió a los presentes y a los espectadores en casa es que a pesar de la clara agresión de Messi al rival y las múltiples cámaras televisivas presentes en el estadio, el representante del Barcelona no fue amonestado e inclusive quien recibió una tarjeta amarilla fue el Centrocampista del Sevilla.
En las redes sociales las críticas le llovieron al máximo goleador en la historia del club catalán por su actitud. Varios aficionados consideran que Lionel por su condición de estrella de fútbol, cuenta con un fuero para cometer faltas dentro del terreno de juego sin tener que pagar las consecuencias.
Es urgente que el Barcelona replantee su estrategia para esta temporada ya que se ven en peligro de irse con las manos vacías en todas las competiciones mayores sino cambian el rumbo que este equipo tiene.