Toda vez que, desde su regreso del Club León hace ya año y medio, José Juan Macías no ha logrado hacer empatía con sus compañeros en Chivas expresando abiertamente su deseo de emigrar a Europa, la directiva del Club Deportivo Guadalajara está dispuesta a darle salida. Sin embargo, la ilusión del delantero de brillar en el Viejo Continente podría verse empañada, pues la nueva etapa de su carrera podría desarrollarse en un club destinado a luchar por evitar el descenso.
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En México se da por hecho que Amaury Vergara, dueño del “Rebaño Sagrado”, ha dado su aval para que Macías firme un contrato de un año en calidad de préstamo con el Getafe de España, donde aparentemente el técnico Michel González lo pidió como refuerzo.
El detalle es que la plantilla de dicho club resulta modesta como para pensar en que pueda ubicarse entre los ocho primeros puestos de LaLiga. A decir verdad, el futuro de los “Azulones” luce complicado al mando de un entrenador que vivirá una segunda etapa con el objetivo de superar la decimoquinta posición en que cerró la temporada pasada, a tan solo cuatro puntos del descenso.
De acuerdo con el portal transfermarkt, José Juan Macías está valuado en 10 millones de euros y el objetivo de las Chivas es ponerlo en el escaparate del fútbol europeo para que al final de año otro club levante la mano para adquirirlo de manera definitiva.
Una gran ventaja del futbolista tapatío es que tiene 21 años, pero su talón de Aquiles radica en lo irregular que puede ser un nivel futbolístico, ya que en ciertos partidos claves disputados con las Chivas prácticamente desapareció de la cancha, algo que en Europa no se pasa por alto.
Al igual que Macías, en su momento otros futbolistas mexicanos se obsesionaron por emigrar sin tomar en cuenta que los clubes europeos a los que llegaron no representaban la mejor opción y al final sus carreras nunca despuntaron como se esperaba. A la distancia surge el recuerdo de Cuauhtémoc Blanco con el Real Valladolid; Javier Aquino con el Rayo Vallecano; y ni que decir de Néstor Araujo con el Celta de Vigo, solo por citar algunos casos.
Ojalá que el caso de JJ Macías resulte una excepción, pues de lo contrario a la vuelta de un año estará de vuelta con algún club mexicano dispuesto a abrir la chequera dispuesto a repatriarlo.