El Comité Ejecutivo de la UEFA decidió que la fase final de la competición europea se jugará en una final a ocho en Lisboa, Portugal.
A los cuartos de final ya han certificado su pase Atletico de Madrid, Leipzig, PSG y Atalanta, no obstante, los cuatro emparejamientos restantes no pudieron disputar su segundo partido. Tras tantear la opción de jugar las vueltas en Portugal, el máximo organismo del fútbol europeo decidió que las vueltas se jugarán en Manchester, Barcelona, Turín y Múnich.
Lo que en un principio parecía un debate sin discusión fue más complicado de lo esperado aunque finalmente, la UEFA ha atendido la demanda de los equipos participantes y tomado la decisión que generaba mayor consenso.
La situación de Covid-19 obligó a la UEFA a tomar la decisión de jugar las eliminatorias a partido único y en un feudo neutral, Lisboa, medida que tuvo como objetivo el maximizar la seguridad de los jugadores y evitar al máximo los desplazamientos.
Después de anunciar la medida, se dejó en el aire el futuro de las eliminatorias que quedaban por disputar. De hecho, entre los medios europeos se insinuó la posibilidad de disputar la vuelta también en Portugal por medidas de seguridad. Ante esta posibilidad, los distintos clubes fueron tajantes y argumentaron (Pep Guardiola, entre ellos) que habiendo jugado un partido en el campo rival, sería injusto jugar el segundo en un campo neutral.
Finalmente, el lunes se anunció que la vuelta de los octavos de final de la Champions League se jugarán en los campos que quedaban pendientes. Por lo tanto, Bayern, City, Juventus y Barcelona pueden respirar tranquilos al saber que podrán pelear por certificar su clasificación a los cuartos de final de Lisboa en sus propios estadios.