(EFE).- Los Tigres UANL del fútbol mexicano protagonizarán este jueves el partido más importante de su historia, cuando intenten vencer al todopoderoso y favorito Bayern Múnich alemán en la final del Mundial de clubes de Catar.
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Después de dar el pasado domingo la campanada al derrotar al Palmeiras, monarca de la Copa Libertadores, los Tigres del entrenador brasileño Ricardo Ferretti se convirtieron en el primer cuadro de la Concacaf en una final Mundial y ahora tratarán de dar la sorpresa ante el campeón europeo.
Será un duelo en el que los mexicanos necesitarán plantarse bien en la faceta de contención para neutralizar la poderosa ofensiva liderada por Robert Lewandowski, y a partir de ahí tratar de no quedar en inferioridad en la mitad de cancha para abastecer balones a los delanteros André Pierre Gignac y Carlos González.
Aunque es el mejor equipo de México a día de hoy, con cinco títulos de liga en los últimos 10 años y tiene en Gignac a un depredador del área, tutear al Bayern Munich, campeón de Europa, es un reto mayor, que si bien Tigres pretende asumir sin complejos, le significará jugar perfecto si pretende salir adelante.
El Bayern llega a la final con la mira puesta en la posibilidad de completar su sexto título de la temporada, tras ganar la Bundesliga, la Copa de Alemania, la Liga de Campeones y las dos supercopas, con lo que igualaría la hazaña el Barcelona en 2009.
Aunque en la semifinal venció Al Ahly egipcio con un 0-2 claro, el equipo alemán dejó algunas preocupaciones, sobre todo en la segunda parte, en la que algunos jugadores se vieron cansados.
“En la final tenemos que jugar mejor. Queremos ganar el título a toda costa”, reconoció Lewandowski a los medios.
Al igual que Ferretti con los Tigres, es probable que el entrenador Hansi Flick repita la alineación, con la excepción del defensor Jerome Boeteng, quien regresó a Alemania por razones personales y debe ser sustituido, tal vez por Niklas Süle.
Si llegará a haber variantes las más posibles serían en el lateral izquierdo, Lucas Hernández en lugar de Alphonso Davies, en la banda derecha en el ataque donde Leroy Sané podría empezar en lugar de Serge Gnabry.
Otro jugador que seguramente entrará en el transcurso del partido es el joven Jamal Musiala, un centrocampista de 17 años bastante habilidoso al que Flick viene dándole minutos constantemente.
El Bayern es el único cuadro alemán campeón mundial de clubes, luego de llevarse el título en el 2013, ante el Raja Casablanca marroquí. Ahora pretende confirmarse como el equipo del momento en el mundo para lo cual no deberá subestimar a los mexicanos, que tienen equilibrio en sus líneas y saldrán a la cancha con la certeza de que juegan el partido de sus vidas.
Agencia EFE