Mientras que la opción de cesar a Diego Cocca como seleccionador de México era un secreto a voces; el arribo de Jaime Lozano para suplirlo resultó sorpresivo debido a que únicamente lo dejarán trabajar de manera interina hasta que los directivos de la Federación Mexicana hayan logrado cerrar la contratación de otro estratega de mayor prestigio internacional, algo que suena bastante incómodo y hasta decepcionante para un técnico joven que hasta hace poco esperaba una oportunidad seria para regresar al trabajo.
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Durante los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, Jimmy Lozano guio a la Selección Mexicana de Fútbol a la conquista de la medalla de bronce, pero antes también consiguió otro metal de bronce en los Juegos Panamericanos del 2019 y además se adjudicó el Torneo Preolímpico de la Concacaf, en 2020.
Con dichas cartas de presentación al final de su ciclo al frente de la selección juvenil, el estratega de 44 años formado en la cantera de los Pumas de la Universidad Autónoma de México hasta hace poco aspiraba a un proyecto a nivel de clubes que le permitiera continuar evolucionado, pues su experiencia en dicho campo se limita a menos de 100 partidos dirigidos en la Liga MX en sus ciclos en los banquillos del Querétaro y Necaxa.
Desesperado por una oportunidad laboral
De hecho, hace unos meses, su nombre figuró como opción para llegar a los Pumas, las Chivas y Cruz Azul, pero al final nada se concretó y quizá de ahí se desprende el hecho de que su desesperación por conseguir trabajo lo haya orillado a aceptar una oferta con la cual su imagen puede terminar seriamente deteriorada, pues no tendrá el tiempo suficiente para desarrollar sus conceptos futbolísticos ni tampoco a los jugadores adecuados para competir en la Copa Oro.
La mejor prueba de ello es que Ivar Sisniega, presidente ejecutivo de la Federación Mexicana de Fútbol (FMF), dejó muy claro que Lozano sólo será el pañuelo que sirva para secar las lágrimas producidas por el deficiente desempeño de un técnico quien nunca debió llegar al Tri, como fue el caso de Diego Cocca.
“Esperamos que el cambio resulte en mejores resultados con Jaime Lozano, un técnico que conoce a los jugadores y es interino. Así se lo pedimos y así lo aceptó y vamos a estarnos juntando mucho con los jugadores para escucharlos y armar el nuevo proyecto”, aseguró el federativo.
Comienza la semana con el #Notituit de @izzi_mx.
Hoy anunciamos la llegada del Profe Jaime Lozano para dirigir la 🏆 Oro. ⚽️🇲🇽 pic.twitter.com/J2bCa3iYZx
— Selección Nacional (@miseleccionmx) June 20, 2023
El Bombero ideal
Y para no generar ninguna expectativa errónea sobre el futuro del “bombero” que tratará de apagar el incendio que impera dentro y alrededor del Tri, el expentatleta originario de Kenosha, Wisconsin, advirtió que Jimmy Lozano sólo será el responsable de la Selección Mexicana durante por la Copa Oro.
“Buscamos algo que sea mejor para la afición, los jugadores y la Selección Mexicana. Vamos a dejar que el proceso avance. Jaime tiene una relación con muchos de los jugadores, es un técnico joven y que podría ser parte de un proceso, no necesariamente para encabezarlo. Lo vemos como la persona idónea para tomar el compromiso”, finalizó.
Lo cierto es que todos los despidos y el reacomodo que se realiza en torno a la Selección Mexicana forman parte de una estratagema orquestada por Juan Carlos “La Bomba” Rodríguez, comisionado presidente de la FMF, para tratar de vender la idea a la afición mexicana de que, después de décadas de manosear al destino del fútbol, esta vez los propietarios de los equipos de la primera división por fin desean fincar los cimientos para desarrollar un verdadero proyecto futbolístico, algo que tristemente nunca sucederá mientras el control del representativo azteca esté en manos de una decena de magnates jugando a desgarrarse las venas por defender a la selección mexicana mientras se enriquecen a costillas de la misma y en detrimento del fútbol.