Mientras que Bertony Robinson, director deportivo de Juventud Escazuceña, categóricamente afirmó que el ex futbolista mexicano Rafael Márquez formaba parte de los socios que fungen como propietarios del equipo Juventud Escazuceña, 24 horas después la propia institución emitió un comunicado donde contradice las declaraciones que su propio directivo emitió durante una entrevista concedida a ESPN.
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“Sí, es cierto, Rafa Márquez es miembro del grupo propietario de Juventud Escazuceña, donde lógicamente tienen injerencia entre las personas que toman decisiones, son un grupo de 10 personas, están pendientes día a día de lo que pasa acá”, indicaba en su momento Bertony, quien hasta se atrevió a afirmar que el Márquez tenía el deseo de viajar a Costa Rica pronto.
En respuesta, el propio ex capitán de la Selección Mexicana al enterarse —a través de Unanimo Deportes— de lo sucedido salió al quite para desmentir las palabras del dirigente costarricense.
“Esta información es completamente falsa, si tuviera para invertir no invertiría (con todo respeto) en un club costarricense”, expresó Márquez mediante un retweet.
Esta información es completamente falsa, si tuviera para invertir no invertiría (con todo respeto) en un club costarricense https://t.co/4dnCP5hPME
— Rafa Marquez (@RafaMarquezMX) June 23, 2020
Una vez que la respuesta de Márquez cobró relevancia a nivel internacional en otros medios de comunicación, fue entonces cuando al equipo Juventud Escazuceña no le quedó otra alternativa que negar lo que su propio su propio directivo daba como un hecho consumado.
“Juventud Escazuceña aclara a todos sus seguidores que el propietario del club es una sociedad de capital español, la cual valoró en el país una oportunidad de invertir en el desarrollo de jugadores. El Señor Rafael Márquez no es inversionista y tampoco forma parte de la sociedad que respalda el proyecto, mucho menos forma parte del club”, señaló un comunicado emitido por el club costarricense, donde por cierto olvidó acotar que toda la información fue producto de la imaginación de su director deportivo.