Durante su ilustre carrera Manny Pacquiao nunca ha sido de aquellos boxeadores que le gusta enfrascarse en guerras verbales de cara a un importante combate.
Por eso, cuando escucha al campeón peso welter Keith Thurman decir que enviará a la leyenda filipina de 40 años al retiro el 20 de julio en el MGM Grand Garden Arena en Las Vegas, es como música para sus oídos.
“Es fácil para mis oponentes hablar antes de la pelea, y estoy acostumbrado a todo lo que dicen, pero cuando llegamos al cuadrilátero, todo cambia y así será el 20 de julio”, aseguró Pacquiao, quien disputará la faja de la Asociación Mundial de Boxeo que posee Thurman en uno de los combates más esperados del año.
“Elegí a Keith Thurman porque es un gran peleador, está invicto y porque podemos dar una buena pelea a los fanáticos. Quiero hacer felices a los fanáticos esa noche y demostrar que aún puedo enfrentar a cualquier oponente”, apuntó.
Un dicho popular de que “la vida comienza a los 40 años” parece motivar a Pacquiao en esta etapa de su carrera.
Con su legado sellado entre los mejores boxeadores en la historia y a una edad en que la mayoría de los peleadores están gozando del retiro, el filipino asegura que todavía le queda la pasión y mucho por hacer en el ring contra peleadores mucho más jóvenes como Thurman, de 30 años.
“Mucha gente está dudando de mi habilidad a la edad de 40 años, así que tengo algo que demostrar”, observó Pacquiao. “En este momento, todavía tengo hambre y sigo disfrutando de esto, y sigo haciendo mi mejor esfuerzo”.
“Thurman dice que es joven, pero veremos quién lucirá más joven en el ring el 20 de julio. Voy a dejar que mis puños hablen por mí”, agrega “Pacman”. “No vamos a tomar a Keith Thurman a la ligera o lo vamos a subestimar. Es un campeón del mundo. Estoy agradecido por lo que ha estado diciendo, porque me da motivación para demostrar que a los 40 años, me siento como de 29”.
Pacquiao (60-7-2, 39 KOs), quien ha ostentado títulos en un récord de ocho divisiones, presenta un envidiable historial que contiene victorias sobre actuales y futuros miembros del Salón de la Fama como Oscar de la Hoya, Ricky Hatton, Marco Antonio Barrera, Erik Morales, Miguel Cotto, Shane Mosley y Juan Manuel Márquez, entre otros.
Y Thurman (29-0, 22 KOs), quien ha reinado en las 147 libras desde julio del 2013, podría ser el próximo que añada a ese lista de púgiles que han sido superados por Pacquiao.
“Toda mi vida he enfrentado desafíos, en la vida, en la política y dentro del ring”, dijo Pacquiao, quien actualmente funge como senador en su país natal. “Keith Thurman es el tipo de desafío que deseo como peleador. Es la prueba más grande. Por eso quiero pelear con él”.
Thurman, sin embargo, es de otro nivel. Las apuestas ya tienen al campeón como favorito para el choque que muy bien podría ser candidato a Pelea del Año por el estilo de ambos.
“Keith Thurman es agresivo y tira muchos golpes. Sólo espero que cumpla con lo que dice de que peleará frente a frente conmigo”, sostuvo Pacquiao, quien no está preocupado por la ventajas físicas del campeón.
“La mayoría de mis oponentes son más grandes que yo y los vencí a todos. Cuando entramos en el ring, no importa. Esto ha sucedido antes y volverá a suceder contra Thurman”, agregó. “Mi experiencia será muy importante para esta pelea. Será útil contra un peleador invicto. Y sentirá lo que perder por primera vez”.