Las recientes declaraciones de Mike Tyson en una entrevista que le realizaron en ESPN encenderá las luces de alarma de los principales organismos que rigen al boxeo.
Retirado del ring desde hace 14 años, es una auténtica leyenda viviente de la categoría de Peso Pesado que ganó dos veces el título mundial en la década de los 80. Sin embargo, su legado podría verse opacado por sus propias declaraciones de las trampas que llegó a realizar para evadir los controles antidoping previo a sus combates.
“Yo solía usar la orina de mi esposa y entonces ella me decía: ‘Cuando salgan los resultados te van a decir, señor Tyson, está embarazado’, entonces, mejor comencé a usar la orina de mis hijos”, confesó el pugilista originario de Brooklyn, Nueva York.
Por escandaloso que se suene, Tyson reveló que otra de las técnicas a las que recurría para que no descubrieran como vertía la orina de otra persona en los frascos que serían analizados, era el empleo de un falso y enorme pene que provocaba incomodidad en las personas encargadas de vigilarlo durante la toma de sus muestras.
“Es que tienes el ‘whizzinator’, el pene falso. La mayoría de los hombres, aunque seas gay, se sienten incómodos cuando les muestras el pene. Así que cuando les mostraba el pene, ellos se volteaban”, expresó.
.@MikeTyson le cuenta a @herculezg como pasaba las pruebas de antidoping pic.twitter.com/m2e17UyfuI
— Ahora o Nunca ESPN (@ahoraonuncaespn) August 8, 2019
