Hace poco más de dos semanas, la cartelera estelarizada por el combate entre Manny Pacquiao y Errol Spence Jr. era sumamente atractiva.
Enfrentaba al cuasi legendario boxeador filipino, que hacía su primer combate en dos años debido a la pandemia del Covid-19, ante un más joven, hábil e invicto campeón welter. Pacquiao, quien venía de vencer sorpresivamente a Keith Thurman para arrebatarle el súper título welter de la Asociación Mundial de Boxeo, tenía ante sí un impresionante reto a sus 42 años, que hacía muy atractivo el combate no solo para la taquilla sino para el Pague Por Ver.
Spence Jr., sin embargo, tuvo que retirarse del combate debido a una retina desprendida, cediéndole la oportunidad al cubano Yordenis Ugás, quien estaba pautado a co estelarizar la cartelera a celebrarse en T Mobile Arena en Las Vegas.
A sus 35 años, Ugás recibe una segunda oportunidad por un título mundial luego de su fallido intento en el 2019 ante Shawn Porter. El cubano le presenta un problema inesperado a Pacquiao, ya que Spence es un boxeador derecho, lo que hizo que el filipino cambiara su estrategia en las últimas dos semanas. Esto, sin embargo, no le preocupa al filipino.
“Sólo me tomó dos días ajustarme a Ugás. He peleado con muchos derechos en el pasadoa”; dijo Pacquiao. “Habría sido más difícil el cambiar de prepararme a enfrentar a un derecho a un zurdo. La mayoría de mis oponentes son derechos, así que no hay problema”.
La pegada, sin embargo, aparenta no presentarle problemas a Pacquiao, En sus 30 combates profesionales, Ugas ha detenido a 12 oponentes y llega con una racha de cuatro triunfos al hilo, incluyendo una decisión dividida ante Abel Ramos para entrar al combate con el cinturón welter de la AMB.
Aún con la pandemia, Ugás ha realizado tres combates en los últimos dos años lo que lo presenta con más actividad que Pacquiao. Es más alto que Pacquiao y su técnica es indiscutible al venir del aficionismo y enfrentar a nombres como Terence Crawford, Francisco Vargas y José Pedraza durante esa etapa de su carrera.
Su hoja profesional, sin embargo, no es comparable con la del filipino, lo que le da el factor experiencia al campeón en ocho divisiones.
Además, Pacquiao tiene una motivación adicional. Quiere su título de vuelta, el cual la AMB le retiró luego de su inactividad de más de dos años.
“No me gustó que alguien tomara mi cinturón sin retarme en el ring”; dijo Pacquiao el miércoles en la conferencia de prensa. “Ambos somos campeones, pero veremos quién tiene el cinturón cuando termine el sábado”.
A Ugás, por su lado, no le preocupa en lo mínimo el cambiar su rival (estaba supuesto a defender ante Fabián Maidana), aún cuando es uno con la experiencia y leyenda de Pacquiao.
“No hay excusas en camino a esta pelea. He estado en esta posición de tomar peleas con poco tiempo de aviso, aunque obviamente nunca ante un peleador del calibre de Pacquiao”, apuntó Ugás, quien ha ganado 11 de sus últimas 12 peleas. “No me preocupa sin embarg y creo que ambos vamos a estar preparados para esta pelea”.