La temporada de los Miami Marlins pende de un hilo.
Los Atlanta Braves se colocaron a ley de una victoria para avanzar a la Serie de Campeonato de la Liga Nacional al blanquear el miércoles por 2-0 a los Marlins en el segundo juego de la Serie Divisional.
El abridor venezolano Pablo López lanzó de forma efectiva en cinco entradas al ceder sólo tres hits y junto a tres relevistas de los Marlins silenciaron al peligroso trío de bravos compuesto de Ronald Acuña, Marcell Ozuna y Freddie Freeman, que se fueron de 11-0, incluyendo cuatro ponches de Acuña.
Sin embargo, López cometió dos errores y le costaron muy caro.
Un día después que Travis d’Arnaud y Dansby Swanson pegaron jonrones que llevaron a los Braves a la victoria e el primer encuentro, pues ambos volvieron a inspirarse en el Minute Maid Park en Houston, Texas.
Swanson conectó un tablazo solitario en el segundo capítulo y d’Arnaud lo imitó en el cuarto episodio para producir las únicas carreras del encuentro. Eso fue suficiente.
Long gone Swanson. #NLDS pic.twitter.com/4MrZuZ3g4N
— MLB (@MLB) October 7, 2020
El abridor Ian Anderson (1-0) se combinó con cuatro relevistas para maniatar en tres incogibles a los Marlins, que aún así tuvieron oportunidades para meterse en juego, pero fallaron en momentos claves, la más importante de ellas en la sexta entrada cuando dejaron las bases llenas después que Matt Joyce fue retirado con una rola a primera base para cerrar el acto.
En la octava la suerte tampoco le sonrió a los Marlins. Luego que Corey Dickerson se embasó al abrir la entrada por error de Swanson, Jon Berti pegó un elevado corto al jardín derecho que Nick Markakis no pudo llegarle, pero aún así tuvo tiempo para forzar a Dickerson en la intermedia.
En lugar de tener dos corredores sin outs, el panorama cambió significativamente, y Jesús Aguilar se ponchó y Brian Anderson bateó roleta al lanzador para el tercer out. El cerrador Marl Melancon entonces completó la faena con una novena entrada perfecta.
Una tarde frustrante para los bateadores de ambos equipos, pero más doloroso para los Marlins que quedaron contra la pared en la serie al mejor de cinco.
No hay dudas que la situación está difícil para los Marlins, pero la historia ha demostrado que no es imposible salir de ese atolladero. Ocho equipos lo han hecho durante la era de la serie divisional y el último de ellos fue los New York Yankees en el 2017 contra los Cleveland Indians.
Con ese el mente, los Marlins enviarán el jueves al montículo al novato Sixto Sánchez para el tercer partido mientras que los Braves enviarán a Kyle Wright en busca de la barrida.