Todo está listo para la repartición de premios de las Grandes Ligas luego de una campaña llena de emociones y actuaciones brillantes. Aquí van mis favoritos para los premios individuales en la Liga Nacional.
Jugador Más Valioso
Durante la mayor parte de la temporada la lucha por el principal galardón estuvo entre Cody Bellinger, de los Dodgers de Los Ángeles, y Christian Yelich, de los Cerveceros de Milwaukee, pero poco a poco Anthony Rendón, de los Nacionales de Washington, se metió en la contienda.
Los tres tuvieron buenos argumentos para llevarse el premio por ser las bujías de sus respectivos equipos, además de ayudarlos a alcanzar la postemporada aunque Yelich quedó fuera por el resto del año debido a una lesión.
Bellinger tuvo una campaña descomunal con promedio de .305, 47 jonrones y 115 remolcadas, además de jugar una excelente defensa en los jardines y en primera base para los Dodgers.
Es cierto que tuvo un bajón ofensivo (.260) en la segunda mitad, pero es de esperarse durante el transcurso de una larga campaña en las que jugó 156 de los 162 partidos de su equipo.
Yelich, quien ganó el premio el año pasado, también estuvo sensacional con promedio de .329 -líder en la liga-, 44 jonrones y 97 empujadas en 130 partidos, hasta que se fracturó la rótula de la rodilla derecha el pasado 10 de septiembre y quedó fuera por el resto del año lo que para mí dio traste a su posibilidad de repetir como MVP.
En esta contienda, mi “wild card” fue Rendón, quien castigó la pelota al son de .320 con 43 dobles, 34 jonrones y 124 remolcadas. No pudo haber escogido un momento más propicio para tener su mejor temporada ya que puede convertirse en agente libre.
Pero, al final, me voy con Bellinger.
Cy Young
Es increíble como la sabermatría ha cambiado la manera de ver el béisbol.
Cuando el venezolano Félix Hernández ganó el premio en la Liga Americana con marca de 13-12 y una efectividad de 2.27 en el 2010 por encima de David Price (19-6, 2.72) y CC Sabathia (21-7, 3.18), casi me da un soponcio.
Todavía me cuesta aceptar que Jacob deGrom se llevó el premio el año pasado con récord de 10-9, aunque tenía una efectividad minúscula de 1.70, y este año voy por el mismo camino ya que el lanzador de los Mets de Nueva York tiene todas las de repetir.
deGrom tuvo récord de 11-8 con 255 ponches y una efectividad de 2.43 en 32 aperturas, y permitió dos carreras o menos en 24 aperturas y en 19 de ellas lanzó al menos siete entradas. Luego del Juego de Estrellas tuvo marca de 7-1 con un ERA de 1.44 en 14 aperturas siendo una de las razones por el repunte de los Mets en la segunda mitad.
Impresionante, no hay dudas de ello, aunque todavía el número de victorias me trabaja la mente.
Por mucho tiempo mi favorito fue el lanzador surcoreano Hyun-Jin Ryu (13-5, 2.41), de los Dodgers, pero apenas tuvo récord de 3-3 con un ERA de 3.51 y entonces también están los dos lanzadores de los Nacionales, Stephen Strasburg (18-6, 3.32), quien fue líder en victorias, y Max Scherzer (11-7, 2.92).
Si me dieran a escoger entre los cuatro lanzadores para armar una rotación basándome sólo en sus números de esta temporada, pues me iría con deGrom, por lo tanto, ahí está el Cy Young.
Novato del Año
Los Mets de Nueva York no pudieron cumplir con las expectativas, pero no fue por culpa de Pete Alonso.
El joven toletero rompió varias marcas del equipo y estableció récords de jonrones para un novato en la Liga Nacional y en las Grandes Ligas con 53 bambinazos, además de terminar como líder en ese departamento en las Mayores. En general, bateó .260 con 155 hits, 30 dobles y 120 carreras impulsadas.
Hubo muchos novatos destacados como Fernando Tatis Jr. (Padres), Mike Siroka (Bravos) y Bryan Reynolds (Piratas), entre otros, pero Alonso fue el más brillante y de mayor impacto.
Manager del Año
Mike Shildt (Cardenales), Craig Counsell (Cerveceros) y Dave Martínez (Nacionales) son los candidatos indiscutibles para el premio, pero me tengo que ir con Shildt cuyo equipo ganó el título de la División Central, la más fuerte de la Liga Nacional.
Los Cardenales estaban jugando para .500 (44-44) al llegar el receso para el Juego de Estrellas y desde entonces jugaron para 47-27 y aseguraron un boleto al postemporada por primera vez desde el 2015. Durante el camino tuvo que lidiar con lesiones a figuras claves de su cuerpo monticular como Adam Wainwright, Michael Wacha, Carlos Martínez y Jordan Hicks, entre otros, y el receptor Yadier Molina.
Counsell podría colarse ya que los Cerveceros se sobrepusieron a la lesión de Yelich y un tambaleante cuerpo monticular para clasificarse a los playoffs, mientras que Martínez estuvo prácticamente en la silla caliente todo el año y logró enderezar el equipo que en un momento dado tenía marca de 19-31.
Pero el trabajo de Shildt, quien está en su primer año completo con los Cardenales, debe ser premiado.