Desde hace 11 años los New York Yankees estaban “enamorados” de Gerrit Cole y tanto estuvieron hasta que lograron finalmente seducirlo a billetazo limpio.
Por un cantidad récord de $324 millones por nueve años, el lanzador derecho cayó rendido ante los encantos del equipo que fue su favorito durante su adolescencia. Inclusive, hay una foto tomada durante el sexto partido de la Serie Mundial del 2001 en que está uniformado con un letrero que dice “Fanático Yankee, hoy, mañana, y por siempre”.
El coqueteo de los Yankees con Cole comenzó en el 2008 cuando lo seleccionaron en el draft de las Grandes Ligas como la selección número 28 de la primera ronda a pesar de que el lanzador había anunciado que asistiría a la Universidad de California (UCLA).
Luego, Nueva York intentó adquirirlo de los Pittsburgh Pirates, pero se quedaron cortos en la contienda cuando los Houston Astros ofrecieron un mejor paquete de talento.
No surprise Gerrit Cole signed a huge deal with the Yankees when you see this pic from the '01 World Series. https://t.co/CL9q0JMKXt pic.twitter.com/lCvBvEpNl5
— NJ.com (@njdotcom) December 11, 2019
Pero ahora como agente libre, los Yankees se tiraron con todo y a la tercera fue la vencida. Sí, les costó romper el banco como ningún equipo había hecho para un pitcher, pero consiguieron el as que tanto condiciaban para su rotación.
Ahora muchos se preguntarán si la firma de Cole, ¿es una buena o mala inversión?
Es muy difícil saberlo ya que Cole ni siquiera se ha puesto el uniforme rayado. El tiempo dirá si fue o no una locura, pero si el derecho sigue siendo el lanzador que tuvo marca de 35-10 con efectividad de 2.68 en 65 aperturas con los Astros entre las últimas dos campañas, y ayuda a Nueva York a volver a la cima del béisbol, pues entonces fue una movida muy acertada.
Cole fue para muchos el mejor lanzador en las Grandes Ligas en el 2019 luego de tener una de las campañas más dominantes con récord de 20-5, un promedio de carreras limpias de 2.50 y 326 ponches en 33 salidas, y ahora será el número uno indiscutible en la rotación de los Yankees.
Otro factor importante que influyó en la decisión de los Mulos fue que luego de la próxima temporada, los abridores Masahiro Tanaka, James Paxton y J.A. Happ serán agentes libres, y tampoco habrán lanzadores del calibre de Cole y Stephen Strasburg, quien firmó nuevamente con Washington, disponibles en el mercado libre.
Jake Arrieta, quien tiene una opción de club, y Trevor Bauer, Robbie Ray, James Paxton, Marcus Stroman, José Quintana, Tanaka, Paxton, y Happ son los principales serpentineros en esa clase, pero ninguno con etiqueta de ser un “caballo”.
Cuando llegue ese momento, los Yankees tendrán su número uno indiscutible en Cole, y con Luis Severino, Domingo Germán y Jordan Montgomery bajo contrato, entonces sólo faltaría redondear el elenco con dos brazos decentes.
Ahora, $324 millones no dejan de ser un riesgo y más aún para un lanzador en que una lesión puede descarrilar en un abrir y cerrar de ojos su carrera. Cole, sin embargo, ha demostrado ser muy resistente, y apenas tiene 29 años.
Si bien los contratos que se están otorgando durante años recientes son exorbitantes, estos se están convirtiendo en la norma para los jugadores estelares, especialmente cuando están en su “peak”. Y si hay un equipo que cuenta con los recursos para pagarlos son los Yankees cuya filosofía es todo un nada. Si no se gana la Serie Mundial, pues es un fracaso.
Cole es un paso importante hacia el alcanzar el Clásico de Otoño en el 2020 y buscar su primer campeonato desde el 2009. De ser así, pues bien valió la inversión.